Antiviolencia propone una multa de 50.000 euros y el cierre un mes del Benito Villamarín

Las deficiencias en los controles de acceso por parte verdiblanca pusieron en peligro, según el organismo dependiente del CSD, el dispositivo de seguridad de la Policía Nacional

Antiviolencia propone una multa de 50.000 euros y el cierre un mes del Benito Villamarín
Los miembros de la fuerza pública, controlando la llegada de los autobuses bético y sevillista. - Lince

La Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, reunida este miércoles 14 de mayo en su sede del Consejo Superior de Deportes, ha propuesto una multa de 50.000 euros y la clausura del Estadio Benito Villamarín por un periodo de un mes por haber "puesto en riesgo el dispositivo de seguridad" establecido por la Policía Nacional durante El Gran Derbi del pasado 30 de marzo de 2025 ante el Sevilla FC, que terminó con el resultado de 2-1 para los verdiblancos. La nota hecha pública por la comisión permanente del citado organismo gubernamental habla de que la institución de la Avenida de La Palmera no estableció "las necesarias medidas de control de acceso y permanencia de espectadores que impidieran la introducción y posterior activación de varios artefactos pirotécnicos, la introducción y exhibición de varias pancartas de grandes dimensiones sin la comunicación previa al Coordinador de Seguridad ni la aportación de los certificados de estar hechas con materiales ignífugos".

Además, Antiviolencia considera igualmente que el anfitrión en aquella jornada 29ª de LaLiga EA Sports no siguió "las indicaciones establecidas por las autoridades gubernativas en relación con los registros para los seguidores visitantes, poniendo en riesgo el dispositivo de seguridad establecido por la Policía", por lo que también recomienda al Comité de Disciplina Deportiva, primer órgano de jurisprudencia en la materia, que no sólo castigue económicamente a los verdiblancos, a quienes considera reincidentes en este polémico aspecto, sino que cierre el Coliseo de La Palmera por un mes, aunque, dado que ya únicamente resta por jugarse allí el Real Betis-Valencia CF de la última entrega del campeonato, la hipotética sanción se cumpliría ya en el Estadio de La Cartuja, que acogerá a los de Manuel Pellegrini las dos próximas campañas mientras se termina el Nuevo Benito Villamarín.

La misma comisión ya pedía 90.000 euros para el club bético por los incidentes ocurridos en la víspera de ese duelo cainita durante el entrenamiento a puerta abierta que congregó a 31.500 personas en el citado escenario por la introducción de bengalas y otros artefactos pirotécnicos, así como por la exhibición de dos pancartas prohibidas, una con insultos al Sevilla FC (en la que se podía leer el lema 'sevillistas, hijos de puta'), que muchos temían fastidiaran las restablecidas relaciones con el otro equipo de la ciudad, y otra enalteciendo a los Supporters, peña radical afincada históricamente en el Gol Sur del recinto heliopolitano y promotora de todos los movimientos en este sentido durante la cita del 29 de marzo de este mismo año.