Betis y Manchester United, a punto de llegar a un acuerdo "muy beneficioso"
El 'caso Antony', de resolución todavía incierta, ha convencido a los 'red devils' de la conveniencia de tener un club satélite en el que apoyarse a la hora de reubicar apuestas estancadas o por explotar

El Manchester United, que ha perdido esta noche ante el Tottenham Hotspur (1-0) la final de la Europa League para rematar una pésima temporada sin clasificación para torneos continentales y mucho más cerca del descenso que de siete primeros de la Premier League, es uno de los clubes ingleses que busca equipos satélite en países cercanos, siempre de las cinco grandes Ligas del Viejo Continente, para acercarse al modelo de competidores directos como el Chelsea o el Manchester City, aunque sin la relación de filialidad del Estrasburgo francés con los 'blues' o del Girona FC, el Palermo o el Troyes en el caso de los albicelestes. Con el 'Brexit' y la imposibilidad legal casi plena de reclutar extranjeros menores de 18 años, la necesidad se ha vuelto acuciante, aunque el factor desequilibrante para los 'red devils' ha sido la exitosa cesión al Real Betis de Antony Matheus dos Santos.

A falta de dos partidos oficiales como verdiblanco, el extremo brasileño ha firmado ocho goles y cinco asistencias en 24 apariciones, revalorizándose plenamente tras una primera vuelta en Inglaterra de pleno estancamiento. Ni el más optimista en tierras mancunianas soñaba con poder recuperar siquiera la amortización pendiente de su fichaje, cerrado en valores estratosféricos con el Ajax (95 millones de euros fijos y cinco en variables), si bien ahora, con algo más de dos años de contrato, se presenta una oportunidad de negocio importante con el ex del Sao Paulo, que desea quedarse al menos un año más en la capital hispalense, aunque la articulación de esta operación sin los ingresos de la Champions League es harto complicada. De todas formas, incluso sin los bonus que habría supuesto una participación más escasa en La Palmera y sólo con los pendientes por los éxitos colectivos, el United considera digna de repetir una gestión que apenas le ha supuesto 1,2 millones netos del elevado salario de su jugador.
Los reportes semanales de los responsables béticos, directamente a la dirección deportiva y ejecutiva de los 'red devils', han convencido en tierras británicas de la profesionalidad de una entidad que ya ha puesto sobre la mesa un pacto mayor de colaboración entre las partes a partir del de Antony, incluso aunque el paulista no vista más de verdiblanca y acabe volviendo a las órdenes de Rúben Amorim o traspasado a otro club. Con algunos nombres ya en las conversaciones, con el CEO Ramón Alarcón como interlocutor válido y Manu Fajardo al frente de las cuestiones más técnicas, la idea sería que en Heliópolis acogieran tanto a jóvenes futbolistas que no se están adaptando tan rápidamente como debieran a la Premier (Ayden Heaven, Habeeb Ogunneye, Toby Collyer, Sékou Koné) como a otros más curtidos que, como el '7', hayan visto frenado su rendimiento (Mason Mount). Un 'win-win' que estaría muy cerca de fructificar y que en el Benito Villamarín ven "muy beneficioso" a corto-medio plazo.
