Los líos con Montiel y Fekir, el VAR, la incredulidad de Borja Iglesias... Las imágenes del derbi Betis - Sevilla

Real Betis y Sevilla Fútbol Club disputaron en la noche del domingo un derbi trepidante y que tuvo todos los ingredientes que se espera en un enfrenamiento entre los eternos rivales de la ciudad de Sevilla: goles, expulsiones, VAR, encontronazo en los vestuarios... Fue un derbi más igualado de lo esperado por ambas aficiones, por como llegaba uno y otro equipo a la cita en el Benito Villamarín. La expulsión de Gonzalo Montiel dejó al Sevilla con uno menos poco antes del descanso que además veía como el Betis se adelantaba tras una jugada muy rara en la que el despeje de Gudelj rebota en Jesús Navas y acaba introduciendo el balón en su portería.

Sin embargo, también antes del final del primer acto, al que se acabaron descontando diez minutos, Fekir veía la roja directa por un codazo al Papu Gómez, que al igual que la Montiel, el colegiado Sánchez Martínez tuvo que ser avisado por el VAR para corregir su decisión tras ver la acción repetida en el monitor a pie de campo. No se lo podía creer el franco-argelino que se marchó con un enfado morrocotudo para vestuarios.

Pudo el Betis haber ampliado su ventaja con dos ocasiones de Borja Iglesias, una antes del descanso y otra nada más comenzar el segundo acto, pero Bono evitó el gol del 'Panda' que poco después acababa como su compañero Nabil Fekir. El delantero del Betis pisaba el gemelo con los tacos a Joan Jordán y tras ser amonestado, Sánchez Martínez volvió a corregir su decisión previo aviso del VAR para ver finalmente la cartulina roja directa. Se queda el Betis con nueve jugadores, uno menos que su rival, lo que le obligó a replegarse y defender el 1-0.

El Sevilla se hizo con el dominio del balón en la búsqueda del empate y lo acabó encontrando a poco del final con un tremendo zapatazo desde 40 metros de Nemanja Gudelj, calcado al que logró no hace mucho en Mallorca, que se colaba por la escuadra de Claudio Bravo. Con el empate, el Sevilla buscó el segundo y las dos mejores ocasiones volvieron a ser del serbio, pero un disparo lo estrelló en el larguero y el otro lo desvió Bravo en la última acción del partido.

Tras el pitido final, el comentado episodio de Monchi al salir a saludar a los 500 sevillistas que acudieron al Benito Villamarín y que le reprocharon desde el banquillo verdiblanco para añadir aún más salsa a un derbi que tuvo de todo.