La mitad sevillista de la familia de Pablo García, la bienvenida de Aitor Ruibal y el regalo de William Carvalho

El extremo del Parque Alcosa rememora su aterrizaje en la primera plantilla verdiblanca con varias anécdotas con sus compañeros

La mitad sevillista de la familia de Pablo García, la bienvenida de Aitor Ruibal y el regalo de William Carvalho
El canterano hispalense, durante la reciente visita a Balaídos. - RBB

Se perfila este jueves como una de las novedades en la alineación del Real Betis para su debut en la Copa del Rey ante el Atlético Palma del Río, tras quedarse, junto a su igual Ángel Ortiz, fuera de la citación para el compromiso liguero contra el Atlético de Madrid. Es, además, Pablo García uno de los nombres de moda del fútbol español por su buen hacer en las categorías inferiores (ocho goles en sus 21 últimos partidos) y su desparpajo no sólo dentro, sino fuera del campo. El del Parque Alcosa ha sido el último invitado del podcast 'El After de Post United', donde volvió a recordar cuando hizo, a la vez que con los heliopolitanos, las pruebas con el Sevilla FC, aunque añadió el matiz de que aquella decisión generó un pequeño cisma en su familia, con colores repartidos.

"Sí, hay mucha división, porque, por ejemplo, mi madre siempre ha sido del Sevilla FC y mi padre, muy del Real Betis. La familia de mi madre es muy sevillista, mucho, menos la tata, que es mi abuela, que ahí al final la importante es del Betis. Mis familiares sevillistas querían que yo hubiese fichado por el Sevilla; también los entiendo a ellos, pero ya tuvieron claro que el equipo en el que estuviera yo tenía que ganar. Entonces, siempre, aun siendo sevillistas, muchos de ellos me ayudan mucho y no se nota ni que son del Sevilla", sentencia el atacante, al que le vino a la memoria una simpática anécdota con William Carvalho durante la pretemporada de la 24/25, en concreto en el primer 'stage' en Austria.

"Menos mal que invitó Willy, porque tenía sólo 30 euros"

"Teníamos un partido el último día. Estuve allí casi 10 sin pelarme. Y yo decía 'madre mía, el primer partido que voy a jugar con el Betis y vaya pintas que llevo'. Pero Willy (William Carvalho) contrató un peluquero y yo le dije que me quería pelar. Llevaba 30 euros en metálico, porque por entonces no tenía tarjeta de crédito ni nada, y creía que me iban a sobrar, incluso, 10 euros o así. Él empezó a decirme que no me preocupase y yo a él diciéndole que lo quería pagar yo lo mía. Menos mal que es un fenómeno y me invitó, porque costaba 50 euros el pelado", desvelaba entre risas Pablo García, que guarda también un buen recuerdo de su estreno en los entrenamientos con la primera plantilla.

Un gol, victoria y salto paralelo con Jesús Rodríguez

"Yo me entrenaba con el filial y jugaba con el juvenil. Un día recibimos la llamada informándonos de que hacían falta varios jugadores para el primer equipo. Yo estaba muy emocionado y contento, porque era la oportunidad que todo bético quiere vivir. Me acuerdo que echamos un partido entre los jugadores del plantel, como decimos allí, y lo ganamos 3-2; marqué yo y dos Luiz Henrique, que ya no está en el Betis (actualmente, en el Zenit). Fue también uno de los primeros entrenamientos que hacía Jesús Rodríguez. Hizo un gol en ese entrenamiento igualmente, por cierto. Mira cómo le ha ido", asevera el de Alcosa en referencia al ya internacional español absoluto y estrella del Como 1907.

Pablo García: "Aitor Ruibal me dio un patón y pensé 'madre mía, yo dejo de jugar ya al fútbol'"

"De lo que sí me acuerdo fue de un patón que me dio mi compañero Aitor Ruibal, al que desde aquí mando un saludo. Me llevé una patada suya en el entrenamiento que, cuando me la pegó, dije 'madre mía, yo dejo de jugar al fútbol ya'. La bienvenida fue increíble. Ya había soltado el balón y todo, pero me llegó por detrás... Al final, eso es la elite. Esos duelos y esa intensidad. Es lo mínimo que me vendría desde ese día hasta ahora", finalizaba un Pablo García orgulloso de lo conseguido hasta la fecha, aunque con ganas de más, empezando por disputar el puesto cada vez que pueda a Antony Matheus dos Santos.