Álvaro Palomo4 min lecturaYa ha informado en varias ocasiones en esta web que el Betis planea reforzar la delantera de cara a la próxima temporada debido a que se producirán salidas con casi toda seguridad en la vanguardia durante el mercado estival.
De esa forma, está previsto que tanto Borja Iglesias como Willian José abandon en Heliópolis. El primero está cedido en el Bayer y es muy difícil que el club ejecute la opción de compra de ocho millones, pero la decisión de quedarse de Xabi Alonso ha alimentado las esperanzas béticas. En el caso de que regresara, se le buscará una salida. El brasileño, vinculado de nuevo con Palmeiras, desea volver a su país, por lo que su adiós está cantado.
En vista de los futbolistas que saldrían, el Betis busca un perfil muy determinado de ariete, en el que cuadra a la perfección un punta que ya tanteó en enero ante la cesión de Borja Iglesias y que, como reveló ED hace varias semanas, se mantiene en la agenda de Manu Fajardo. Se trata del zambiano Patson Daka, un delantero de 25 años que milita en las filas del Leicester.
Gusta mucho a la dirección deportiva y ahora se ha puesto más a tiro más que nunca por diversas circunstancias, hasta el punto de convertirse en una posible oportunidad de mercado para el Betis. Y es que el problema en esta operación podría radicar en el precio que exigiera su club actual y más si finalmente consiguiera el ascenso a la Premier, debido a que el punta había tomado carrerilla tras un comienzo con poco protagonismo, marcando entre diciembre y principios de febrero siete tantos, lo que disparó su valor y acercó al Leicester al ascenso.
Sin embargo, su situación y la de su propio equipo ha experimentado un cambio radical en el último mes y medio que favorece los intereses del Betis, pues el futbolista ha pasado de estar en el centro de la actualidad a pasar al ostracismo en una pésima racha del Leicester.
De esa forma, el técnico, el ex sevillista Enzo Maresca, lo ha condenado a un sorprendente segundo plano en marzo, en el que tan solo ha disputado 65 minutos en cuatro partidos, y únicamente cuatro en los tres últimos tres. Tras arrancar el mes con 61 minutos ante el Queen Park Rangers, no salió el banquillo contra el Sunderland, disfrutó solo de cuatro minutos contra el Hull City y este viernes tampoco saltó al terreno de juego en la derrota del Bristol City.
El Leicester ha entrado en barrera y en mes y medio ha dinamitado su ventaja y complicado sus opciones de ascenso. Y es que en los últimos seis partidos ha sufrido cuatro derrotas y tan solo ha sumado cuatro puntos, lo que le ha costado caer al tercer puesto y salir de las plazas de ascenso directo que ha ocupado la mayor parte de la temporada en favor del Ipswich Town y Leeds United. Evidentemente, su ostracismo actual y el hecho de no ascender, obligaría al Leicester a rebajar sus pretensiones por el zambiano, subrayado en la agenda verdiblanca.