Villa Gómez3 min lecturaEl incipiente grupo de animación que abandera ya el mundo ultra en verdiblanco, Gol Sur 1907, ha aparcado sus diferencias con el Real Betis por la implantación de medidas de seguridad a su juicio excesivas, como la huella dactilar para acceder al Benito Villamarín, prohibición de tifos o restricciones de acceso o de acercamiento al autobús del equipo a su llegada al estadio, si bien eso corresponde más bien a la Subdelegación del Gobierno en Andalucía. En el siguiente duelo en casa tras las 'mareas verdes' coperas en Extremadura, hubo hasta una pancarta de protesta, así como en el derbi de la primera vuelta en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Una reclamación en la que coinciden con sus eternos rivales, Biris Norte, que reivindican también desde hace tiempo que "el fútbol es de los aficionados", denunciando que los altos precios de entradas y abonos, así como de la TV, están alejando al público de las gradas.
Pero el colectivo radical heliopolitano y la entidad aparcan sus diferencias con ocasión del encuentro del próximo domingo 28 de abril (21:00 horas) ante el Sevilla FC, secundando en sus redes sociales la iniciativa institución que, bajo el 'hashtag' #TodoAlVerde, pretende teñir Sevilla estos días de "un color que nos une a todos". Así, aparte de poblar los balcones de la capital hispalense de banderas verdiblancas, el citado grupo de reciente creación comunica a sus seguidores: "El domingo tenemos un partido crucial para poder llegar a Europa. Es por ello que desde la grada de animación queremos crear el ambiente de las grandes noches del balompié y animamos a nuestros socios y el resto del estadio a acudir al Benito Villamarín con la camiseta del Real Betis Balompié o una verde. El primer gol lo marcamos nosotros".
Mientras tanto, desde el Ramón Sánchez-Pizjuán aprovecharon el encuentro de este lunes ante el RCD Mallorca, especialmente cuando empezó a ponerse de cara, para emitir los primeros cánticos en clave derbi, algunos subidos de tono, como es (por suerte o por desgracia) tradición ya en ambos bandos. La última, firmada por la propia peña Biris Norte, lleva aparejada una crítica por las pocas entradas puestas a disposición de la afición sevillista, 530, aunque menos de 400 serán para los socios nervionenses, quedando las otras para peñas y compromisos institucionales. En la primera vuelta, fueron pocas más (unas 600) las que pudieron repartirse a precio módico (30 euros). Una alusión al Coliseo de La Palmera como 'macro granja', en claro tono peyorativo, cierra por este martes el intercambio de mensajes desde el bando ultra de ambas orillas de la ciudad.