¿Cuál es el récord de goles en un solo partido profesional?

El partido profesional con más tantos se disputó en Madagascar y terminó con un surrealista 149-0, solo posible por las circunstancias especiales que lo propiciaron

¿Cuál es el récord de goles en un solo partido profesional?
El equipo proitagonista negativo d ela gran goleada de la historia. - ED

La historia del fútbol recoge un sinfín de episodios curiosos, de anécdotas inverosímiles o de resultados espectaculares, y no cabe duda que entre ellas sobresale una anécdota que ya forma parte de los anales del balompié profesional al tratarse del partido con más goles a la par que la goleada más abultada.

No obstante, cuando se habla del marcador más llamativo de la historia no se puede esperar en ningún caso la barbaridad de goles que se anotaron en el partido que ostenta el récord a día de hoy en el fútbol profesional.

Y es que encuentro en el que se registraron más dianas acabó con un resultado completamente inimaginable en circunstancias normales, pues finalizó con un impresionante 149-0, lo que cuesta creer por la dificultad de que todos estos tantos suban al marcador en solo 90 minutos.

Ocurrió el 31 octubre de 2022, en un partido oficial en la isla de Madagascar, correspondiente más concretamente a los 'play off' por el título de liga que enfrentó al AS Adema, que ha pasado la historia como el protagonista de la mayor goleada, y al SO l´Emyrne. Esta deslumbrante cifra de goles supone cerca de dos tantos por minuto, por lo que no se entiende si no se conocen los entresijos de lo sucedido en aquella cita.

Todos en propia puerta

No en vano, como cabía esperar, este resultado está rodeado de circunstancias especiales y tiene truco, lo que lo convierte todavía en más rocambolesco y surrealista. Tanto es así que el equipo ganador, el Adema, no marcó ni uno solo de los 149 goles que registraron su casillero, porque los anotaron en propia puerta los jugadores del equipo rival.

Una decisión motivada por una problemática arbitral en un partido anterior que había cercenado sus opciones de proclamarse campeón, por lo que, a modo de protesta, sabedores de que ya no se jugaban nada, apostaron por marcarse la mayor cantidad de goles posibles en 90 minutos. Es decir, que era poner el balón en juego en el círculo central y dirigirse directamente a su portería para perforar la red una y otra vez ante la estupefacción de los futbolistas del Adema, que no derramaron ni una gota de sudor.

Suspensión a los goleados

Esta actitud no quedó impune, pues la Federación de Fútbol de Madagascar tomó cartas en el asunto al considerar imperdonable y no permisible este tipo de conductas en el deporte profesional. Tanto es así que suspendió a buena parte de los futbolistas del So I'Emyrne.