Neymar rompe su sequía, aunque las molestias físicas reaparecen

La noche del miércoles dejó una nueva muestra del papel dual que suele asumir Neymar en los momentos decisivos. El atacante del Santos brilló y oscureció a partes iguales en el empate 1-1 ante Mirassol, correspondiente a la 34ª jornada del Campeonato Brasileño, firmando un gol tempranero y, más tarde, cometiendo el penalti que definió el marcador final. Una velada intensa en el estadio Vila Belmiro que volvió a colocar al ídolo santista en el centro de la escena.

Un inicio fulgurante

El delantero abrió el partido con una jugada de manual al minuto 4: un contragolpe veloz generado tras un saque de esquina del rival. Neymar se escapó en solitario, encaró a Walter y definió con categoría para poner en ventaja al conjunto albinegro. El tanto llegó en un día especial para el club, pues Brasil celebraba el Día del Rey Pelé, recordando el mítico gol número 1.000 del eterno ídolo en 1969.

Con este tanto, el número diez sumó su cuarto gol en el Brasileirão, rompiendo una sequía que ya superaba los tres meses y que lo había mantenido en el foco por sus problemas físicos.

Un penalti que cambió el guion

Sin embargo, la segunda mitad trajo una historia muy diferente. En una acción dentro del área, Neymar llegó tarde a un cierre y derribó a Reinaldo. El árbitro inicialmente dejó seguir, pero el VAR intervino y, tras revisión, señaló la pena máxima. El propio Reinaldo ejecutó desde los once metros y selló el empate para el Mirassol, un equipo que continúa sorprendiendo en la competición.

El error del astro brasileño pesó en el ambiente. El Santos había empezado firme, pero terminó cediendo dos puntos fundamentales en la lucha por evitar el descenso, situación que mantiene al club bajo una presión creciente.

Entre molestias físicas y destellos de magia

Durante el encuentro, Neymar también generó preocupación al requerir atención médica tras un mal apoyo. Aunque logró continuar, quedó claro que su estado físico está lejos del ideal. Desde su retorno en enero a la institución que lo vio nacer, el atacante ha enfrentado más de cien días de baja por diferentes lesiones.

Aun así, ante más de 14.000 aficionados, completó los 90 minutos y dejó chispazos del futbolista que deslumbró en Europa. Incluso estuvo cerca de marcar un segundo gol con un disparo de tiro libre desde larga distancia que obligó a Walter a lucirse.

Clasificación apretada y futuro incierto

El empate no permitió al Peixe alejarse de la zona comprometida. Con 37 puntos, el equipo sigue a solo uno del Vitória, que marca el límite del descenso. Por su parte, el Mirassol alcanzó los 60 puntos y continúa firme en puestos de Copa Libertadores.

Santos necesita urgentemente que su estrella reduzca los errores y recupere la consistencia. Neymar, aunque cada vez más participativo, debe convertirse en el líder fiable que el club requiere en uno de los momentos más delicados de su historia reciente.