Se lia en Porto por el Mundial de Clubes

El Porto, dirigido por Martín Anselmi, cerró su participación en el Mundial de Clubes con un empate espectacular (4-4) frente al Al Ahly. Sin embargo, este resultado no fue suficiente para evitar una prematura eliminación en la fase de grupos, lo que supuso un rotundo fracaso para el conjunto portugués. Para la afición, la decepción fue aún mayor al constatar que el Benfica, eterno rival del club, sí logró avanzar a los octavos de final del Mundial de Clubes.

El resultado ha generado un intenso debate en torno a la continuidad de Anselmi al frente del banquillo. El técnico argentino, que llegó con grandes expectativas tras su paso por el fútbol sudamericano, no ha conseguido cumplir con los objetivos marcados, y su futuro inmediato está más en duda que nunca.

Recibimiento hostil tras el fracaso en el Mundial de Clubes

La tensión se trasladó rápidamente a la llegada del equipo a Portugal. Cientos de seguidores se congregaron en el Aeropuerto Francisco Sá Carneiro de Oporto para expresar su descontento con cánticos e insultos dirigidos tanto a los jugadores como al cuerpo técnico. El clima fue especialmente hostil, hasta el punto de que la directiva solicitó apoyo policial para facilitar el traslado del equipo y evitar incidentes mayores.

Martín Anselmi, cuestionado por su gestión en el Mundial de Clubes, evitó realizar declaraciones contundentes ante los medios y se limitó a decir que “no es momento de hablar del futuro”, una frase que no ha calmado los ánimos entre los seguidores del club.

Durante la llegada, se pudieron escuchar gritos como “Anselmi, dimisión”, mientras algunos aficionados exigían explicaciones por la pobre imagen ofrecida en el torneo. La eliminación del Mundial de Clubes ha supuesto un duro golpe para toda la plantilla, quienes también fueron increpados por los aficionados presentes.

Porto, Anselmi y el Mundial de Clubes: una crisis abierta

La clasificación del Benfica a la siguiente fase del Mundial de Clubes no ha hecho sino profundizar la crisis en el entorno del Porto. El contraste entre el éxito de su máximo rival y su propia eliminación ha avivado el descontento de una afición que ya venía mostrando señales de impaciencia en las últimas semanas.

Por el momento, la directiva del club no ha emitido ningún comunicado oficial respecto a la continuidad de Anselmi, aunque se prevé que se tomen decisiones en los próximos días. El fracaso en el Mundial de Clubes ha dejado al Porto sumido en una profunda crisis deportiva e institucional.

La actuación del equipo en el Mundial de Clubes no solo ha decepcionado por los resultados, sino también por la imagen ofrecida en el campo. Una competición que se presentaba como una oportunidad para recuperar prestigio internacional ha terminado convirtiéndose en un capítulo oscuro de la historia reciente del club. La presión de la afición, unida a la falta de respuestas por parte del cuerpo técnico, anticipa una etapa de cambios que podrían marcar el futuro inmediato del Porto.