El Real Madrid, vecino de Donald Trump
El club merengue instala su cuartel general para el Mundial de Clubes a pocos metros del epicentro del poder trumpista en Florida

En su primera parada para disputar el Mundial de Clubes, el Real Madrid ha decidido alojarse en uno de los rincones más exclusivos del planeta: Palm Beach, en el estado de Florida. Esta localidad, ubicada a unos 80 kilómetros al norte de Miami, es una especie de refugio de élite para las grandes fortunas de Estados Unidos, y también para algunos magnates internacionales. En este entorno de lujo y poder, el equipo blanco ha elegido como base el hotel Four Seasons, que se encuentra a apenas unos minutos a pie de Mar-a-Lago, la célebre propiedad de Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
Mar-a-Lago no es solo una mansión con historia —fue construida a comienzos del siglo XX por una destacada figura de la alta sociedad—, sino también uno de los centros de influencia personal del propio Trump. En 1985, el entonces empresario neoyorquino compró el inmueble por unos 10 millones de euros. Desde que accedió a la presidencia, Trump ha mantenido esta finca como un lugar de retiro, donde frecuentemente interrumpe su agenda oficial para jugar al golf o recibir a invitados selectos.
La presencia del Real Madrid en esta zona supone una curiosa coincidencia con uno de los enclaves más politizados y blindados de Estados Unidos. De momento, no hay confirmación de que Trump tenga previsto coincidir con la expedición madridista, ya que su agenda marca desplazamientos fuera del país, concretamente hacia Canadá. Aun así, recientemente se ha mostrado interesado por el fútbol: su hijo menor, Barron, lo practica, y en semanas pasadas el presidente se reunió con Gianni Infantino, presidente de la FIFA, en la Casa Blanca, en un gesto que subraya la importancia que Washington quiere dar al Mundial.
Palm Beach es mucho más que un punto en el mapa. Según datos de Forbes, en esta ciudad de apenas 10.000 habitantes hay identificados al menos 50 multimillonarios, una cifra que asciende hasta 65 si se amplía el análisis a toda la isla, según Palm Beach Daily News. En conjunto, estos residentes acumulan una riqueza estimada en más de 530.000 millones de euros, lo que la convierte en uno de los puntos más densamente poblados por grandes fortunas a nivel mundial.
Vecinos ilustres
Entre los habitantes de esta comunidad se encuentran figuras de enorme relevancia en el mundo del deporte y el espectáculo. Avram Glazer, propietario del Manchester United, reside aquí, al igual que los dueños de varios equipos punteros de la NFL, como los Philadelphia Eagles, Miami Dolphins, New England Patriots o los Carolina Panthers. A ellos se suman rostros más reconocibles para el gran público, como el actor Sylvester Stallone, o el cantante Rod Stewart.

La estancia del Real Madrid en este enclave de poder y lujo sirve como telón de fondo singular para su participación en el torneo. Mientras la atención mediática se centra en lo que ocurre dentro del campo, fuera de él el equipo comparte escenario con algunos de los personajes más influyentes del panorama político, económico y cultural de Estados Unidos. La presencia blanca en Palm Beach simboliza, una vez más, el lugar que ocupa el club en el universo global del deporte y su capacidad para moverse en los círculos más selectos del poder.