Se confirma la catástrofe económica del Manchester United
El club inglés acumula una ruina económica gravísima y los resultados para mejorar la situación siguen sin llegar. Hoy, nuevo 'pinchazo' ante el Everton

El Manchester United atraviesa una grave crisis económica y deportiva. El club inglés acumula una deuda superior a los 1.000 millones de libras, de los cuales 360 corresponden a pagos pendientes con otros equipos por fichajes recientes. Esta situación ha llevado a la directiva a tomar decisiones drásticas para reducir los costos operativos.
El equipo, que históricamente fue uno de los más poderosos de Europa, se encuentra en una posición crítica en la Premier League. Actualmente, ocupa la decimoquinta plaza de la clasificación y la posibilidad de acceder a competiciones europeas parece cada vez más lejana.
Un gasto insostenible y una plantilla costosa
Según reveló The Athletic, los estados financieros del club al cierre del segundo trimestre de 2024 evidenciaron una deuda de 360 millones de libras solo en fichajes, de los cuales 168 millones deben ser abonados en el próximo año. La llegada de Ruben Amorim al banquillo no ha dado los resultados esperados, empeorando incluso los registros de su predecesor, Erik ten Hag.
A pesar de esta delicada situación, el United aún mantiene una esperanza en la Europa League, ya que ganar el torneo le garantizaría el pase a la próxima edición de la Champions League. Sin embargo, esta posibilidad luce más como un deseo que como una meta realista.
Recortes y medidas impopulares
El equipo de Old Trafford ha ejecutado más de 250 despidos como parte de una reestructuración, y se espera que más de 100 empleados sean cesados en los próximos meses. Algunas de las medidas de austeridad han generado polémica en Inglaterra, como la reducción en el uso de suministros básicos y la sustitución de la comida de los empleados por las sobras de los palcos VIP.

Cabe destacar que la deuda relacionada con los fichajes es independiente de los 731 millones de libras de compromisos financieros que arrastra el club, principalmente derivados de la polémica adquisición de la familia Glazer en 2005. En conjunto, el pasivo total del United supera el umbral de los 1.000 millones de libras.
No levanta cabeza en la Premier
El conjunto de Ruben Amorim consiguió un agónico (2-2) ante el Everton como visitante en la jornada 26 de la Premier League.
El Everton tomó la ventaja en el primer tiempo. A los 19 minutos, tras un córner, Beto aprovechó un desorden en el área para definir de media vuelta y vencer a André Onana. Catorce minutos después, el United todavía no había generado peligro y los locales ampliaron la diferencia. Beto desbordó por la derecha y asistió a Jack Harrison, cuyo remate fue rechazado a medias por Onana, permitiendo que Abdoulaye Doucouré convirtiera de cabeza.

El United tardó 72 minutos en realizar su primer disparo entre los tres palos, pero lo convirtió en gol. Bruno Fernandes ejecutó un tiro libre que impactó en la mano de Doucouré dentro del área, lo que le permitió un segundo intento desde una mejor posición. Esta vez, el portugués no falló y recortó distancias. El empate llegó ocho minutos después, cuando Manuel Ugarte conectó un potente zurdazo desde el borde del área, venciendo a Pickford y anotando su primer gol con los ‘Red Devils’. En el tiempo añadido, el árbitro concedió un penalti al Everton tras una caída de Ashley Young, pero tras revisar la jugada en el VAR, anuló la decisión.
Un punto que no cambia el panorama
El Manchester United suma 30 puntos en 26 jornadas y sigue muy lejos de la zona alta de la tabla. A 31 puntos del líder Liverpool y con 13 de ventaja sobre el descenso, el equipo atraviesa una de sus peores temporadas en la era Premier League. Sin títulos desde 2013 y sin haber bajado del tercer puesto en sus primeras 21 temporadas, la crisis del United se refleja tanto en lo deportivo como en lo institucional.
