El Ceuta de José Juan Romero obra el milagro y asciende a Segunda

Hacía 44 años que un equipo de la Ciudad Autónoma de Ceuta no estaba en el fútbol profesional español, en aquella época también en Segunda división, algo que ha cambiado este fin de semana gracias al triunfo de la AD Ceuta FC ante el Fuenlabrada (1-2) y al empate del Real Murcia ante el Antequera.

La temporada del Ceuta ha sido de ensueño, convirtiéndose en el equipo con mayor racha de encuentros sin perder en Primera Federación, una racha histórica que le ha ayudado a lograr un hito que pasará a los anales de la historia de la ciudad, el de volver al fútbol profesional casi medio siglo después.

Después de que el Real Murcia empatara (0-0) ante el Antequera el sábado, el equipo ceutí sólo necesitaba sumar tres puntos en los tres encuentros que le restaban, pero los de José Juan Romero no han querido especular y se han llevado el triunfo en el estadio Fernando Torres ante un necesitado Fuenlabrada, inmerso en la pelea por el descenso.

Los madrileños no se lo pusieron fácil a los ceutíes, que se adelantaron muy pronto pero luego supieron sufrir hasta el minuto 87, cuando Víctor Corral, futbolista del filial, marcó el definitivo 1-2 que devuelve al Ceuta a Segunda división.

El presidente Luhay Hamido culmina así el reto mayúsculo que se propuso cuando cogió la presidencia de la AD Ceuta FC en la temporada 2016/17. Desde entonces, Luhay logró ascender de Tercera a Segunda RFEF ante un histórico como el Xerez, para ascender al año siguiente a Primera RFEF.

En su primer año en la categoría de bronce del fútbol español sufrió mucho, con sólo 7 puntos casi a finales de diciembre, pero el equipo de José Juan Romero, que volvió en la jornada 4 de ese curso, realizó una remontada histórica para salvar la categoría de una manera sorprendente. El siguiente curso logró clasificarse para los play-offs de ascenso a Segunda, donde cayó con mucha polémica ante el Nàstic de Tarragona. Ya para esta temporada, el Ceuta era uno de los favoritos para disputar esos play-offs, siendo ese el objetivo del club, pero las expectativas se han superado por mucho y, en el grupo más igualado de la categoría, ha logrado el ascenso a falta de dos jornadas para el final del campeonato.

Ya se quedó a las puertas de subir a Segunda en 2008, cuando fue eliminado por el Girona en la final del play-off de ascenso de la extinta Segunda División B, un Girona que siguió encadenando ascensos hasta jugar esta temporada la Champions League. Lo que ha hecho este año el Ceuta hace olvidar el sufrimiento ante los gerundenses y contra el Nástic, colocando a una ciudad de escasos 18 kilómetros cuadrados en la élite del fútbol español.

JOSÉ JUAN ROMERO, EL OTRO GRAN CULPABLE

Al margen de Luhay Hamido, quien también tiene buena parte de la culpa de lo conseguido por el cuadro caballa es el entrenador de Gerena José Juan Romero.

El sevillano llegó al Ceuta en 2019 tras dejar el filial del Real Betis, logrando subir a los ceutíes de Tercera a Segunda RFEF. El año después del ascenso se marchó al Eldense, al que también subió de categoría, mientras que el Ceuta ascendió a Primera RFEF de la mano de Chus Trujillo.

Tras el horrible inicio de los ceutíes en Primera Federación, el Ceuta recurrió a José Juan, que había sido tratado muy mal en el Eldense y se marchó de allí. Romero, que a día de hoy es un ídolo en la Ciudad Autónoma, asumió el reto y ahora ha logrado lo impensable años atrás. Un José Juan Romero que en verano era uno de los principales candidatos para sustituir a Luis Carrión en el banquillo del Oviedo.

Otra pieza clave ha sido el director deportivo, Edu Villegas, con la difícil tarea de convencer a los futbolistas de ir a una ciudad muy desconocida en toda España.

Sin duda, el gran mérito de lo logrado por Hamido, Romero y todo el club es haber conseguido que una ciudad donde lo habitual era ser del Real Madrid o del FC Barcelona, ahora vuelva a apoyar al equipo de la tierra, el cual vivió momentos muy oscuros que desencantaron a los ceutíes.