El Pacha Espino explota contra Iñigo
El Pacha Espino fue sustituido en el partido ante el Celta y no se lo tomó nada bien; tuvieron que frenarle un par de compañeros en la banda

El Rayo Vallecano ha conseguido un empate que no deja satisfecho del todo al club, pero sí limpia un poco las malas sensaciones de Pamplona. El partido comenzó con un tanteo de ambos y por un momento se temió repetir la imagen porque los nervios atenazaron a los rayistas cuando el Celta generó un par de ocasiones claras. El partido se fue igualando y en el segundo tiempo realmente fue cuando se rompió. Salvo 10 minutos tras el gol del Celta, el Rayo volvió a ser un equipo vertical, con una buena presión e intensidad alta.
Antes del gol del empate, Iñigo Pérez hizo un doble cambio para activar al equipo y le salió muy bien. Uno de ellos fue el de Pep Chavarría por Espino, que no sentó nada bien al argentino. Era su primera titularidad en LALIGA y su partido no estaba siendo malo, pero el técnico navarro quiso mover hacia una ficha más ofensiva para buscar el empate. Movistar + captó las imágenes del enfado del lateral. Arrasó dándole una patada a un micro de ambiente y el mosqueo del Pacha Espino fue tal que Óscar Trejo y Unai López le tuvieron que parar en la banda para calmarle y hacerle entrar en razón. Al final, la cosa se quedó sólo en eso, en un enfado momentáneo.
Íñigo Pérez se refirió a esta situación al final del encuentro y le restó importancia para calmar las aguas. Aseguró que entendía a su futbolista. "No hay nada de lo que hablar cuando un jugador está en el campo, como es el caso de Pacha, está jugando bien y el cambio corresponde solo a la táctica. El jugador no lo entiende porque está jugando bien y tiene razón. No hay nada de qué hablar mientras no haya una falta de respeto. He sido jugador y entiendo la rabia y la frustración que se siente cuando te cambian".
Finalmente, el Rayo consiguió su cometido con los cambios y empató el choque. Incluso, pudo acabar ganando con un par de ocasiones de De Frutos y Álvaro García. A Iñigo le salió bien la jugada y consiguió que su equipo mejorara su imagen y consiguiera doblegar al Celta en muchas ocasiones en la última media hora de juego. Sólo le faltó rematar la jugada con la remontada, pero se encontraron a un gran Radu que salvó los muebles al conjunto de Vigo.