El Rayo y LaLiga aumentan su distancia

El club franjirrojo vuelve a tomar una decisión que genera debate entre sus aficionados y lo separa de la mayoría de clubes de LaLiga

El Rayo y LaLiga aumentan su distancia
El Rayo y LaLiga aumentan su distancia. - Cordon Press

Por tercer año consecutivo, el Rayo Vallecano ha decidido no adherirse al acuerdo conocido como Grada Visitante, una iniciativa impulsada por LaLiga que busca fijar en 30 euros el precio de las entradas para los desplazamientos de los aficionados. Este convenio pretende democratizar el acceso al fútbol y permitir que los seguidores visitantes puedan acompañar a su equipo sin que el coste sea un obstáculo.

En esta ocasión, la decisión de Vallecas ha vuelto a generar malestar entre los seguidores franjirrojos. Ya en los dos primeros partidos como visitante, ante Girona y Athletic Club de Bilbao en Montilivi y San Mamés respectivamente, el precio de las entradas superó los 30 euros, generando quejas visibles desde el fondo del estadio: "Por no firmar acuerdo de entradas", rezaba una pancarta durante el duelo ante el FC Barcelona.

LaLiga aclara la situación

La propia Liga ha confirmado los clubes que sí forman parte del acuerdo: Celta, Deportivo Alavés, Athletic Club, CA Osasuna, Girona FC, Valencia CF, RCD Mallorca, Atlético de Madrid, Getafe CF, Real Betis, Sevilla FC, Levante UD, Elche CF y Real Oviedo. Los únicos que se han quedado fuera son Real Madrid, FC Barcelona, Villarreal, RCD Espanyol, Real Sociedad y el Rayo Vallecano.

El modelo Grada Visitante ha evolucionado para aumentar el número de entradas disponibles según la capacidad de cada estadio, manteniendo un precio máximo de 30 euros y buscando que más aficionados puedan asistir a los encuentros fuera de casa. LaLiga espera superar en un 15% las cifras de la temporada pasada, cuando se vendieron 64.000 entradas bajo este convenio.

Debate abierto en Vallecas

La decisión del Rayo vuelve a poner de relieve el conflicto entre la política de precios del club y las demandas de su afición. Mientras que LaLiga insiste en que el acuerdo busca "facilitar el acompañamiento de las aficiones, llenar las gradas con los colores de los clubes y hacer el fútbol más accesible para todos", el club de Vallecas ha optado por mantenerse al margen, priorizando criterios internos sobre la uniformidad de precios.

Aunque el club no ha detallado públicamente las razones de su negativa, la situación ha abierto un debate intenso entre seguidores, medios y la propia LaLiga sobre el papel de los clubes en la accesibilidad del fútbol. La temporada 2025/26 promete mantener viva esta polémica cada vez que el Rayo juegue fuera de casa, mientras sus aficionados esperan que la entidad escuche sus demandas o al menos aclare los motivos detrás de su decisión.