Hola, Osimhen; adiós, Vlahovic
El futuro de Victor Osimhen y Dusan Vlahovic podría cruzarse este verano para Nápoles y Juventus

El Nápoles podría definir gran parte de su estrategia para la próxima temporada en función de lo que ocurra con su principal estrella: Victor Osimhen. La posible salida del atacante nigeriano significaría una inyección económica clave para reforzar la plantilla de cara a la Serie A y a las competiciones europeas. Su traspaso permitiría al club del sur de Italia encarar un nuevo proyecto con más margen de maniobra financiera.
Osimhen, codiciado en Inglaterra y valorado desde Italia
El periodista de DAZN, Orazio Accomando, ha arrojado luz sobre el futuro del delantero africano en un mensaje difundido en redes sociales. Según el comunicador, hay fuerte interés desde la Premier League, especialmente del Chelsea y el Manchester United, aunque también ha aparecido en el radar del Barcelona. Para clubes extranjeros, la cláusula de salida se sitúa en 75 millones de euros, un precio que algunos gigantes europeos están dispuestos a valorar seriamente.
En el panorama local, la Juventus aparece como un posible competidor por hacerse con los servicios del exgoleador de la Serie A. Sin embargo, para que los de Turín puedan entrar en la puja, será crucial que aseguren su clasificación a la próxima edición de la Champions League y gestionen adecuadamente las salidas de jugadores de alto coste. Aunque la cláusula de rescisión no aplica a los equipos italianos, el Nápoles estaría dispuesto a negociar con otros clubes del país, aunque exigiría una cifra superior, en torno a los 100 millones de euros.
Un cambio de ciclo en Turín
En el contexto juventino, el fichaje de Osimhen podría estar acompañado de una reestructuración ofensiva. El club no tiene previsto mantener a sus dos delanteros actuales. Dusan Vlahovic, cuyo coste ya ha sido amortizado en gran parte, podría salir por unos 20 millones de euros para evitar pérdidas económicas. Por otro lado, se espera que la directiva intente retener a Randal Kolo Muani, actualmente cedido, aunque no forzarán su permanencia si el PSG impone condiciones poco favorables.

Por su parte, el Nápoles, presidido por Aurelio De Laurentiis, no ha cerrado la puerta a una salida dentro del campeonato italiano, aunque se mantiene firme en su valoración del jugador. Osimhen, cuyo rendimiento ha sido fundamental en las últimas campañas, sigue siendo una de las piezas más codiciadas del fútbol europeo y por ello cuenta con el interés de grandes clubes europeos para hacerse con sus servicios en el próximo mercado estival.