El nombre de De Gea vuelve con fuerza

Después de un año sin club y en medio de muchas especulaciones sobre su futuro, David De Gea ha vuelto a encontrar su lugar en el fútbol profesional. El experimentado guardameta español, que fuera emblema del Manchester United durante más de una década, ha iniciado una nueva etapa en la Fiorentina, donde se ha reencontrado con su esencia como futbolista.

Un año sabático que cambió su perspectiva

Tras salir del United, De Gea tomó una decisión poco común en el mundo del fútbol de élite: detenerse, entrenar en solitario y no aceptar ninguna oferta, a pesar de recibir propuestas de Inglaterra y Arabia Saudita. “Estaba saturado, mental y físicamente”, confesó en una entrevista para Cronache Di Spogliatoio. Para él, ese tiempo le permitió reencontrarse consigo mismo y recargar energías tras 13 años intensos en Mánchester.

Durante ese tiempo, entrenó con el técnico Craig Ellison, forjando una relación de confianza. "Entrenamos bajo la lluvia, en campos modestos, pero ese esfuerzo fue esencial para estar listo de nuevo", relató el portero.

Respeto perdido y cambio generacional

Uno de los aspectos que más pesa en la reflexión del madrileño es la transformación que ha vivido el fútbol en lo social. “Cuando llegué a Inglaterra, saludabas al entrar en el vestuario. Hoy los jóvenes apenas miran. Se ha perdido el respeto, vivimos en un fútbol distinto”, lamentó. Y añadió: “Muchos jóvenes creen haberlo logrado todo tras jugar un solo partido profesional”.

A sus 34 años, De Gea asume con naturalidad su rol de veterano en un vestuario joven. En la Fiorentina, intenta ser un referente: “Quiero ser ejemplo dentro y fuera del campo”, dice, recordando sus conversaciones con Juan Mata y Ander Herrera, compañeros de generación.

Florencia: un nuevo comienzo

De Gea no oculta su entusiasmo con su llegada al conjunto viola: “Desde el primer día me sentí como en casa. Viola Park es impresionante, pocas instalaciones en Europa están a ese nivel”. En su primera temporada, logró consolidarse como figura y fue fundamental para que el club obtuviera un puesto en competiciones europeas. “Estoy muy feliz. El club apostó por mí y yo respondí renovando hasta 2028. Es uno de mis últimos contratos y lo valoro mucho”.

Sin presión por la selección española

Aunque no descarta volver a vestir la camiseta de la Selección Española, De Gea afirma que no es una prioridad. “No me quita el sueño. He vivido grandes momentos con España, jugué dos Mundiales y dos Eurocopas. Si el seleccionador me llama, estaré listo, pero ahora mi foco está en Fiorentina”.

Desde sus inicios como delantero escolar hasta consolidarse como portero, De Gea ha sido moldeado por su entorno: su padre, también portero, fue crucial en su cambio de posición. Además, ha enfrentado dificultades como problemas de visión, los cuales superó con cirugía láser. "Entrenaba sin lentillas... ¡Así mejoré mis reflejos!", recuerda entre risas.

Manchester: el hogar que no fue eterno

Aunque soñaba con retirarse en Old Trafford, reconoce que el fútbol no siempre sigue los guiones ideales. “Quería quedarme toda la vida en el United, pero el fútbol es así. Ahora estoy bien, sin rencores, con nuevas metas”.

Mirando al futuro sin perder el pasado

Sin importar si vuelve a la selección o no, David De Gea ha demostrado que aún tiene mucho por ofrecer. Con serenidad, liderazgo y trabajo silencioso, el madrileño ha reconstruido su carrera en un entorno distinto, pero lleno de posibilidades. "Aquí encontré tranquilidad, ambiente familiar y competencia seria. Eso es todo lo que un futbolista necesita para rendir al máximo nivel".