Los últimos datos de la 'operación Ocampos' y los planes de reinversión de Monchi

Ya se presumía una recta final de la ventana estival intensa en Nervión, aunque el pésimo arranque del equipo, con un apurado empate y dos derrotas en las tres primeras jornadas, obliga a los responsables del Sevilla FC a dar un golpe de timón, de momento sin afectación al ocupante del banquillo. Julen Lopetegui mantiene el respaldo de Monchi, todavía con un peso decisivo en las decisiones del consejo de administración, por lo que serán los encuentros en LaLiga ante el Barcelona (este sábado 3 de septiembre, a las 21:00 horas) y en el arranque de la Fase de Grupos de la Champions League contra el Manchester City (el martes 6-S, en la misma franja), ambos en el Ramón Sánchez-Pizjuán, los que dictararán sentencia en uno u otro sentidos.

Hacen falta refuerzos, tanto ofensivos como para la contención, por lo que el director general deportivo se ha puesto manos a la obra para rematar una plantilla de la que salieron los dos centrales titulares, a la sazón sus jugadores con un valor de mercado más alto, para cuadrar las cuentas tras un ejercicio de pérdidas que afectó a su margen de maniobra. Aparte de Diego Carlos y Koundé, los rectores blanquirrojos han encontrado acomodo a muchos de sus descartes (Luuk de Jong, Pozo, Óscar Rodríguez, Augustinsson, Javi Díaz, Berrocal, Rony Lopes e Idrissi). Y el siguiente, en una operación conveniente para todos, será Lucas Ocampos, que ya no se ejercitó este martes, cuando fue recogido por su agente, uno de los poderosos hermanos Sabbag, en la capital hispalense para viajar a Amsterdam. Existe acuerdo entre clubes para que el atacante argentino firme por el Ajax, con dinero contante y sonante después de vender a Antony al Manchester United por un fijo de 95 millones y otros cinco en variables.

Aunque el baile de cifras es importante, el periodista César Luis Merlo, siempre perfectamente informado, especialmente de las gestiones con implicados del Cono Sur, aclaraba que el ex del Marsella firmará por cuatro campañas con los neerlandeses (hasta 2026), que abonarán al Sevilla un fijo de 23 kilos y otros tres en variables. Una operación muy rentable por un jugador que no está a su mejor nivel desde hace año y medio o dos años, por lo que también necesita relanzarse. Además, pese a que otros con los que no cuenta Lopetegui o cuenta menos, como Munir y Gudelj, con sólo un curso más de vinculación además, se niegan a salir, Monchi trabaja en aumentar la nómina de la 'operación salida', con ésos y otros nombres sobre la mesa: Óliver Torres, Delaney, En-Nesyri, Suso... Las 23:59 horas del jueves están a la vuelta de la esquina, por lo que no hay tiempo que perder.

Sin Ocampos, el Sevilla tiene dos fichas libres, aunque necesita una tercera, ya que la idea es firmar un delantero centro, un extremo polivalente (como el que se va) y un medio de corte defensivo. El segundo debe ser el ex realista Januzaj, con el que hay gestiones adelantadas, mientras que la 'short list' de artilleros está compuesta por Raúl de Tomás, Lucas Boyé y Sadiq Umar. No han trascendido demasiadas alternativas para competir con Fernando, Gudelj, Delaney (si se quedan) y Jordán, aunque ESTADIO Deportivo ha podido conocer el seguimiento a dos pivotes o mediocentros que son agentes libres y están bastante cotizados: el austríaco Florian Grillitsch y el inglés Ross Barkley, aunque no existe nada avanzado con ninguno, por lo que habrá más opciones por delante.

En cuanto al atacante, hay que aclarar que los nervionenses sí tenían liquidez, pero no es hasta que se puso en positivo en lo que se conoce vulgarmente como tope salarial cuando LaLiga te permite reinvertir todo lo que ganes o ahorres (en fichas y amortizaciones). Por poner un ejemplo: si el SFC tenía de margen en positivo 10 millones de euros, sólo podría gastarse eso en nuevas contrataciones (entre sueldos y traspasos). Si vuelve a ponerse en negativo con Sadiq, por poner un caso, no le permitirían inscribirlo, ya que en esa tesitura se aplica la regla del 1:4 (únicamente el 25% del total para rearmarse). Por eso, Monchi está tratando de que el colchón sea lo más grande posible, puesto que, aunque Januzaj y quizás el pivote lleguen libres, el sueldo del belga y la prima de fichaje que piden son importantes. Por esta misma razón, cuadran más Boyé y Sadiq, revalorizables por edad y prestaciones pese a pagar una venta alta, que siempre sería a plazos, que abonar al Espanyol una cantidad similar (al primer pago por el argentino o el nigeriano) por una cesión remunerada, asumiendo que llevaría aparejada una opción u obligación de compra elevada.