Cervera pega el 'bombazo'

El Tenerife logró una victoria de oro en su visita al Sporting de Gijón, al remontar un marcador adverso con una actuación táctica impecable dirigida por Álvaro Cervera. A pesar de comenzar por debajo en el marcador tras un penalti convertido por Otero, el conjunto insular respondió con contundencia gracias a los goles de Sergio González, Waldo Rubio y Enric Gallego, sellando un 1-3 definitivo que pone en entredicho la continuidad de Albés al frente del banquillo gijonés.

El plan de Cervera, desde el primer minuto

Desde el arranque del encuentro, el guion del partido llevó el sello de Cervera. Su equipo supo dormir el ritmo del juego, enfriar el ambiente y neutralizar a un Sporting falto de ideas. Mientras los locales apenas generaban peligro, el Tenerife amenazaba en acciones puntuales. Una volea de Waldo obligó a lucirse a Yáñez, en una de las pocas ocasiones claras del primer tiempo. Sin embargo, cuando todo parecía controlado para los visitantes, una mano inocente de Bodiger dentro del área cambió el panorama. Otero transformó el penalti en el 50' y el Sporting se adelantaba sin haber hecho méritos reales para ello.

Pero lejos de descomponerse, el Tenerife ajustó líneas, se reorganizó y aprovechó cada resquicio. En un abrir y cerrar de ojos, el equipo canario dio la vuelta al marcador. Primero Sergio González igualó tras un saque de esquina botado por Waldo, y apenas un minuto después, el propio Waldo firmaba un golazo desde la frontal tras una pérdida de balón de Dubasin.

Caída libre del Sporting ante un Tenerife en alza

El tercer tanto llegaría con la rúbrica de Enric Gallego, tras un rechace en otro córner que desató el caos en El Molinón. El descontento de la grada se hizo evidente: cánticos contra la directiva, pañuelos al aire y una clara sensación de que el equipo va sin rumbo.

El Sporting, superado en todas las facetas del juego, evidenció una vez más su fragilidad defensiva y su incapacidad para reaccionar ante la adversidad. Mientras tanto, el Tenerife, de la mano de un Cervera cada vez más respetado, encadena su tercera victoria consecutiva y se mantiene con vida en la lucha por evitar el descenso, colocándose a ocho puntos de la salvación.

Con un equipo ordenado, disciplinado y efectivo, Álvaro Cervera ha devuelto la fe a la afición chicharrera y ha demostrado, una vez más, por qué es uno de los técnicos más solventes de la categoría.