Los continuos rumores que sitúan a los jugadores franquicia del
Betis en el punto de mira de clubes con poderío económico y que van a jugar competición europea la próxima temporada están generando cierto nerviosismo entre los aficionados béticos.
La venta de
Pau López ha sido, sin duda, un acierto de los actuales rectores. Ingresar casi 30 millones de euros por un portero -por muy bueno que sea- y quedarse en propiedad con un delantero de 23 años que tiene aún tiene margen y edad para explotar es una extraordinaria operación.
El club obtiene liquidez y esta primera venta puede suponer el punto de partida para dar forma una planificación que va lenta (sólo se ha fichado a
Juanmi). Mientras se espera a qu
e Haro y Catalán cierren el fichaje de
Borja Iglesias, el goleador deseado por
Rubi, sigue sonando con fuerza la salida de Junior, la venta de
Lo Celso y, últimamente, también el posible adiós de
William Carvalho.
El traspaso de Junior lleva meses aireado y, si es cierto que el
Betis puede ingresar entre 30 y 40 millones de euros, ya estarían tardando los dirigentes en hacerlo efectivo.
Junior es sustituible y, de hecho,
Serra ya tenía atado a
Álex Moreno, a quien se espera en
Heliópolis. Obviamente, el
Betis tendría que fichar a otro lateral zurdo además del todavía jugador del
Rayo Vallecano.Lo Celso sigue estando en la parrilla de salida. 70 millones de euros podrían poner el punto final del argentino a su único año en el
Betis. Pero llegado el caso, ya empieza a complicarse el panorama.
Canales, Bartra y Carvalho quedarían como líderes de un equipo que perdería a su gran talento provocando un 'efecto llamada' a la desbandada.
Catalán aseguró en la
Cadena COPE que "el equipo no se va a desmantelar", pero sin
Pau, sin
Junior y, sobre todo, sin
Lo Celso, se correría el riesgo de perder también a
William Carvalho, quien casi nunca ha mostrado el apego y la identificación al
Betis que sí han manifestado
Bartra o Canales. A las magníficas ventas deben seguirle compras de garantías que tranquilicen a la afición y a los futbolistas que quieren competir al máximo nivel junto a otros grandes jugadores.