Giro inesperado en el futuro de Pedro Acosta

El inicio de temporada de Pedro Acosta no fue fácil. Los problemas de rendimiento con la KTM RC16 y la complicada situación económica de la marca austríaca llevaron al bicampeón a plantearse un posible cambio de equipo. Sin embargo, las mejoras introducidas en la moto y los recientes podios en el Gran Premio de la República Checa han dado un nuevo aire al piloto murciano, que ahora afronta la segunda mitad del año con más confianza y motivación.

Recuperando sensaciones

“Al principio del año fue duro, cometí algunos errores que me costaron caro, pero poco a poco estamos más cerca del podio. Antes del verano conseguimos nuestro primer podio en Brno y ahora, con las mejoras de la KTM, esperamos ser más constantes”, explicó Acosta, quien reconoce la dificultad de asimilar un año complicado, marcado por la presión de tener que rendir al máximo desde el inicio de la temporada.

El murciano añade que este inicio desafiante le ha servido para crecer como piloto: “Aprendí a mantener la calma y a gestionar mejor los momentos difíciles. Este año me ha enseñado que la paciencia y la concentración son clave para mantener el ritmo y sumar resultados positivos”.

Escuchando nuevas oportunidades

Acosta no cierra puertas de cara al futuro y muestra madurez al hablar de posibles cambios de equipo. Sobre el interés del VR46, indicó: “Cuando alguien se interesa en ti, hay que escucharlo por respeto. Sabemos que hay marcas que están un paso por encima y siempre busco la mejor moto para tener opciones de resultados”. Estas declaraciones dejan entrever que las negociaciones con Valentino Rossi y su estructura están sobre la mesa, aunque el murciano prefiere no precipitarse y centrarse primero en lo que queda de temporada.

Mirando hacia 2026

El piloto es consciente de que 2026 será un año clave en su trayectoria profesional: “Ese es el año en el que necesito hacerlo bien, para mí, no para nadie más. Por ahora, lo importante es centrarse en la segunda parte de la temporada y luego veremos qué sucede con el futuro”. La planificación a largo plazo y la gestión de sus opciones parecen ser parte de su estrategia para consolidarse entre los mejores del campeonato.

Aprendiendo de los desafíos

Acosta confiesa que este inicio complicado ha sido un aprendizaje: “Cuando no estás acostumbrado a estas situaciones, es aún más duro. He determinado este año como un año de aprendizaje, similar a mi primer año en Moto2. Pero estamos aquí, con ganas de mejorar y seguir creciendo”.

Además, el murciano subraya la importancia de mantener la motivación y la confianza a pesar de los altibajos: “La temporada es larga, hay momentos buenos y momentos complicados. Lo esencial es mantenerse centrado, aprender de cada carrera y seguir sumando experiencias que me permitan estar preparado para los grandes retos que vienen”.

Con esta combinación de aprendizaje, prudencia y ambición, Pedro Acosta afronta la segunda mitad de la temporada con la vista puesta tanto en los podios como en las decisiones estratégicas que podrían definir su futuro en MotoGP, mientras se consolida como uno de los jóvenes talentos más prometedores del campeonato.