Estadio Deportivo5 min lecturaAmbos futbolistas han entrado como campeones en la historia del club castellonense, junto al también argentino Ramiro Funes Mori, que no dispuso de minutos en la final, pero que fue alineado en algunos partidos, tanto en la fase de grupos como en las eliminatorias posteriores.
De este modo, Rulli y Foyth, ambos originarios de La Plata y salidos de Estudiantes, se suman a la larga lista de jugadores llegados de Argentina que han entrado en la historia del Villarreal.
Entre ellos que se encuentran Juan Román Riquelme, Martín Palermo, Rodolfo Arruabarrena, Sebastián Battaglia, Juan Pablo Sorín, Fabricio Coloccini, Gonzalo Rodríguez, Juan Antonio Pizzi, Guille Franco, Ariel Ibagaza o Mateo Musacchio.
Gero Rulli es protagonista de las dos fotografías clave de una final insólita, que llegó al minuto 120 con empate a uno en el marcador y que necesitó la impensable cifra de veintidós penaltis para resolverse.
Además, lo hizo con la peculiaridad, probablemente sin precedentes en el fútbol de élite, de que hubieran llegado a lanzan una pena máxima cada uno de los veintidós futbolistas que estaban sobre el terreno de juego y de que los veintiún primeros marcaran. Solo el portero del equipo inglés, David de Gea, lanzador del último disparo, falló.
No falló, sin embargo, Rulli, quien detuvo el último lanzamiento instantes después de haber marcado el vigésimo primer penalti de la serie con un disparo colocado al ángulo, que le coronó como el héroe de la final.
Con 29 años, Rulli, natural de La Plata, ha jugado la Liga Europa como el Villarreal tras ser suplente en el campeonato de Liga, ya que llegó al club para cubrir las espaldas del titular de los últimos años, Sergio Asenjo, y el técnico, Unai Emery, decidió alternar a los porteros en función de las competiciones.
Tras haber jugado en Estudiantes de La Plata, Real Sociedad y Montpellier, Rulli ha vivido en este partido la experiencia menos previsible de su carrera, pues en unos minutos ?pateo y convirtió un penal y atajo otro?, algo que ni de lejos podía haber pasado por su mente, ni tan siquiera cuando empezaron los lanzamientos de la tanda decisiva, tal y como señaló tras el partido.
Juan Foyth, por su parte, disputó la final tras una decisión técnica especialmente programada por su entrenador, quien apuró sus posibilidades de recuperación tras haber estado lesionado las últimas semanas, por lo que reapareció en la final.
Lo hizo como lateral diestro, puesto en el que Emery lo ha utilizado durante buena parte de la temporada, aunque a punto estuvo de tener un paso testimonial por el partido como consecuencia del golpe que recibió en la cabeza a los diez minutos de juego.
Hubo dudas sobre su regreso al partido y el equipo estuvo varios minutos con un hombre menos mientras se le protegía la cabeza con una venda blanca, que lo convirtió en inconfundible durante todo el encuentro, y los médicos trataban de frenarle una hemorragia nasal qyue nuy cerca estuvo de impedirle regresar.
Foyth, de 23 años y que del Estudiante pasó al Tottenham Hotspur inglés, club que le ha cedido al Villarreal, cubrió perfectamente su parcela y fue sustituido en los últimos instantes previos a la prórroga.
Ambos futbolistas fueron clave en un partido que queda para siempre en la historia del Villarreal al ser el más importante de su primer siglo de vida, pero también en la del fútbol mundial, por la trascendencia de una final europea y pero también por las circunstancias en la que se resolvió.
Alfonso Gil