Doloroso final de Jon Rahm en Augusta

No está siendo el Masters de Augusta de Jon Rahm. Pese a que a su llegada afirmo llegar en buen momento y con la mente plenamente despejada, su primera vuelta en tan mítico torneo le abocó a tener que tirar de épica para primero mantenerse con vida –pasó el corte muy apurado– y posteriormente asaltar las primeras posiciones de la clasificación. Pues bien, ese segundo objetivo ha saltado por los aires tras un doloroso final de ronda en este sábado 12 de abril.

El golfista español anunció el día antes que se veía con opciones de pelear por la chaqueta verde en las dos jornadas que restaban del primer major de la temporada, pero de igual modo señaló que debía jugar mejor. Estas fueron sus palabras: "Gracias a Dios he metido el último putt y no están tan lejos. A 10 golpes en un major se puede remontar. Y estoy cerca de jugar como quiero hacerlo. Eso sí, si sigo en la tónica que estoy no gano ni pa Dios", sentenciaba.

Con tan buen talante, la jornada empezaba de manera espectacular para un Rahm que hacía birdie en sus tres primeros hoyos. Sí, en esos momentos parecía que sería su día, que estaba listo para una vuelta de ensueño que le llevase a meter miedo a los primeros –Justin Rose, Roy McIlroy y Bryson DeChambeau–. Pues eso... Lo parecía.

Pese a ese enorme comienzo, entre ele hoyo 5 y el 10 cometió dos bogeys que le hicieron perder ritmo; sin embargo, no bajó los brazos y firmó dos birdies en el 14 y el 16. En esos momentos, con un global de -2, había una cierta esperanza en recortar incluso más terreno, ya que Rose, antes de jugar, tenía un -8. Pues bien, todo se fue por la borda en los dos últimos hoyos, los cuales cerró con sendos bogeys para dar carpetazo, salvo sorpresa mayúscula, a repetir su victoria del año 2023 en Augusta.

En desarrollo.