Lucas Torreira, a tiro del Sevilla

Lucas Torreira, a tiro del Sevilla
Lucas Torreira, joven mediocentro de la Sampdoria que se ha convertido en la revelación de la Serie A. - Alejandro Sáez
Alejandro SáezAlejandro Sáez 3 min lectura
Al margen de un delantero que complemente la delantera que actualmente configuran Luciano Vietto y Wissam Ben Yedder, la dirección deportiva sevillista analiza otros perfiles entres los que se encontraría el de un centrocampista del estilo de Roque Mesa, futbolista por el que los de Nervión apostaron este verano, topándose con las exigencias económicas de Las Palmas, que solicitaba diez millones de euros.

Una búsqueda en la que Monchi y los suyos habrían puesto sus ojos en la figura de Lucas Torreira, joven mediocentro de la Sampdoria que se ha convertido en la revelación de la Serie A a sus 20 años. Aunque es de origen uruguayo, este jugador no ocuparía plaza de extranjero, ya que cuenta con pasaporte comunitario por su ascendencia española. Un futbolista por el que, según ha podido conocer ESTADIO Deportivo de primera mano, habrían existido ya unos primeros contactos, estando la operación en manos de unos intermediarios.

Torreira, que cumple con un perfil mixto que destaca tanto en la fase defensiva como a la hora de sacar el balón jugado, vería con motivación la posibilidad de dar el salto a España, y más a un equipo como el Sevilla, donde tanto él como su entorno consideran que podrían desarrollar mejor su fútbol, al ser demasiado físico el italiano. Con contrato en vigor hasta 2020, habiéndose interesado ya la Juve y la Roma, la 'Samp' estaría solicitando unos 12 millones de euros por el futbolista, cantidad que, sin embargo, podría ser rebajada considerablemente, al ser Torreira uno de los jugadores peor pagados de la Serie A del Calcio, a razón de 120.000 euros netos por temporada.

La Sampdoria, lógicamente, ya ha tomado cartas en el asunto, presentándole una mejora de contrato al jugador que, sin embargo, sólo sería aceptada por éste si ve rebajada su cláusula de rescisión.

Un futbolista, por tanto, que se pone a tiro de la dirección deportiva sevillista, que contaría en todo momento con el beneplácito del futbolista para facilitar la operación. En Nervión, sin embargo, estarían ahora más pendientes del tercer delantero, no habiéndose dirigido de forma directa aún al futbolista ni a su representante.
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