Nervión se erige esta temporada en un escenario para el festival del gol, en una sesión continua de acierto que genera la sensación de que el Sevilla de Machín dispone de argumentos para aspirar a cotas altas esta campaña.
Las dudas iniciales, sobre todo tras encadenar tres partidos sin marcar ante
Villarreal, Betis y Getafe, han quedado sepultados por la descomunal pegada de un equipo que se presenta arriba con numerosos efectivos y nunca baja la intensidad independientemente de la índole del choque, como demostró el pasado jueves ante el
Akhisar en un ejercicio de profesionalidad.
Los seis goles ante los turcos redondearon la cifra de 50 goles en lo que va campaña para los nervionenses, una cifra estratosférica que supone
una media de 2,6 tantos por encuentro. Guarismo que invita a soñar y que suscita sumo respeto a un Huesca que viaja a Nervión como el más goleado de
Primera con 20 dianas recibidas, las mismas que los blanquirrojos a favor, y con la intención de pertrecharse atrás para acallar el carrusel de celebraciones en el Sánchez-Pizjuán.
Francisco, en su segundo encuentro como técnico azulgrana, ha expresado con claridad que van "a defender todos", lo que obligará a los nervionenses a tomárselo con calma y tirar de sus recursos arriba para derribar el muro y forzar con el primer tanto que los oscenses asuman más riesgos. Tarea que facilitarán las bajas en la medular del
Huesca, sin Melero ni Musto, y para la que, después de las rotaciones europeas,
Machín desplegará su once habitual en LaLiga, con la interrogante de si finalmente incluirá o no a
Kjaer, duda después de lesionarse en el partido en el
Camp Nou. El danés ya ha entrenado con el grupo, si bien el técnico podría optar por no arriesgar, en cuyo caso se mantendría la defensa del jueves.
En los carriles,
Arana recuperaría su sitio en la zurda pese a que resulta muy probable que
Escudero entre en la lista, mientras que el jefe de la media,
Banega, retoma los mandos del equipo una vez que descansó en la UEL, acompañado por el imprescindible
Franco Vázquez y por Sarabia. Y arriba, la efectividad de u
na de las duplas más letales de Europa con André Silva y Ben Yedder, sin minutos contra el
Akhisar y preparados para entonar la canción preferida de este
Sevilla y prorrogar así la fiesta del gol en
Nervión.