Ansu Fati es el jugador de moda en este comienzo de la temporada 19/20, pues su irrupción en la elite con tan sólo 16 años ha sido brutal.
Llegó a la localidad sevillana de Herrera cuando tan solo tenía seis años junto a su familia. Tras jugar en el equipo de la localidad, se incorporó al Sevilla FC en el año 2010. Dos años después, el FC Barcelona se lo birló para sus alevines, algo que todavía duele por Nervión. Sobre todo, viendo su explosión.
Según Catalunya Radio, a finales de julio firmó su primer contrato profesional con el filial azulgrana, con un sueldo base de 300.000 euros, que irá aumentando cada temporada en 500.000 más, y una cláusula de rescisión de 100 millones.
De quedarse en el primer equipo, esas cifras se doblarían, aunque, viendo su progresión, no sería de extrañar que Bartomeu le llamase ya para blindarle.
En el canal de Youtube de Fútbol Carrasco se puede disfrutar de las diabluras que hacía Fati en el Sevilla FC cuando aún no había cumplido 10 años.