Y ahora, Lopetegui, ¡a por el bote!

Julen Lopetegui es como uno de esos personajes 'raros' que van a participar a los concursos de televisión. De entrada, en un primer contacto visual, de él suele llamar la atención que se le ve demasiado serio en sus comparecencias, cortante en la mayoría de sus respuestas, poco hablador, inexpresivo y hermético hasta rozar lo obsesivo... Luego, con el paso de los 'programas', uno entiende que está ante una mente privilegiada, un cerebro superlativo que le convierten en un excelente líder de masas y en un ganador nato. Que al fin y al cabo es lo relevante. Ganar es lo que de verdad le va a dar de comer. Eso de vencer partidos su Sevilla FC lo hace como pocos. Y en esas rarezas se esconde la genialidad.    

"¡A por el bote, oé!". Como cantarían en 'La ruleta de la suerte', o de forma mucho más jocosa en 'La Resistencia', el entrenador nervionense acudirá a Madrid el próximo domingo a por una de las escasas pruebas que le faltan por conseguir en un día redondo para él. Lopetegui cumplirá su partido número 100 en Primera división y el caprichoso destino quiere que la efeméride le llegue, precisamente, en el estadio de su debut en LaLiga, el Santiago Bernabéu.

Su estreno fue un 19 de agosto de 2018 en un Real Madrid-Getafe. Sólo disputó 9 choques más como técnico merengue, los otros 89 encuentros oficiales han sido ya como entrenador de un Sevilla FC, donde está batiendo todos los registros de triunfos de la historia de la entidad de Eduardo Dato. Su enorme índice de victorias -un asombroso 58 por ciento- le permiten estar a punto de completar el rosco liguero de sus 25 rivales hasta la fecha. Y lo está haciendo sin vacilar, en muchos de los casos a la primera, como hacen los mejores concursantes que han pasado por el popular Pasapalabra presentado por el alcalareño Roberto Leal. Por su mente no ha pasado otra cosa que no sea vencer en la capital desde las 23:00 horas del pasado martes, que es cuando acabó el importante choque de Champions ante el Wolfsburgo alemán (2-0). Pues eso, Julen, ¡A por el bote!.

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