Marta Sánchez3 min lecturaEl primer día de competición en el torneo Conde de Godó se saldó con cara y cruz para el tenis español, ya que Pedro Martínez logró una gran victoria con remontada incluida para meterse en los octavos de esta competición mientras que Roberto Carballés cayó eliminado con serias molestias físicas, perdiendo en primera ronda una de las grandes bazas. Además, Holger Rune derrotó a Albert Ramos poniendo prácticamente punto y final a su carrera en el tenis.
Por ello, en este segundo día de competición había muchas esperanzas con los otros protagonistas en tres partidos con sello español en Barcelona. Pero la mañana ha empezado mal, con una nueva baja a costa de Pablo Carreño. El gijonés tenía un complicado reto en su debut en este torneo, ya que se enfrentaba contra Arthur Fils, número catorce del mundo, y ha caído ante el francés.
El cuadro del Barcelona Open tiene otra baja española, ya que Pablo Carreño no ha podido superar a Arthur Fils, aunque sí le ha puesto las cosas complicadas en el primer set. El partido comenzó con una sorprendente igualdad, hasta que el gijonés consiguió romper el servicio de su rival y coger una ventaja significativa en el marcador, poniéndose hasta 4-1. Pero el francés metió una marcha más y fue capaz de igualar el resultado, forzando el 'tie break'.
Una oportunidad que aprovechó a la perfección, ya que consiguió llevarse la primera manga gracias a sus 8 puntos. Y en el segundo set, Fils ya tenía mucha más fuerza y no tardó tanto en cerrar el partido, en el que ha alcanzado la victoria gracias a un resultado final de 6-8 y 3-6. Por tanto, el francés avanza a octavos mientras que Carreño dice adiós a sus opciones.
Para remontar la actuación local en este segundo día de competición hay que esperar a los próximos partidos, de Jaume Munar y Carlos Alcaraz respectivamente. El próximo en saltar a la pista será el mallorquín, que también tendrá un oponente muy duro como es Frances Tiafoe, quién ha accedido al cuadro principal debido a la baja de Lorenzo Musetti.
Por otra parte, el último en competir será Alcaraz, que llega a esta cita con mucha confianza tras proclamarse campeón en el Masters 1000 de Montecarlo, aunque con sólo un día de descanso. El número dos del mundo se verá las caras contra Ethan Quinn.