Swiatek pierde y se la lía a un recogepelotas
La polaca se ha quedado a las puertas de una final y, lo peor, tuvo un feo gesto en la pista que podría haberle mucho daño a alguien que no tuvo culpa de sus fallos

La rusa Mirra Andreeva, número once del ránking mundial con tan solo 17 años, ganó este viernes por segunda vez en menos de un mes a la polaca Iga Swiatek (7-6(1), 1-6 y 6-3), número dos y vigente campeona, para volar a la final del WTA 1.000 de Indian Wells.
Tras una batalla de dos horas y 17 minutos en la tarde fría y ventosa de Indian Wells, Andreeva, entrenada por la española Conchita Martínez, acabó con la racha de diez victorias seguidas de Swiatek en el desierto californiano.
Andreeva ya había ganado a Swiatek el pasado febrero en los cuartos de final de Dubai, camino del primer WTA 1.000 de su joven carrera, y reeditó esa hazaña en California para convertirse en la más joven finalista de este torneo en 24 años.
A sus 17 años y 321 días, Andreeva es la quinta jugadora más joven en plantarse en la final de Indian Wells. El récord lo ostenta Mónica Seles, que la alcanzó, perdiéndola, a los 17 años y 91 días en 1991. La más joven campeona de este torneo fue la suiza Martina Hingis, a los 17 años y 166 días en 1998.
Firmó una actuación sobresaliente contra una de las mejores jugadoras del mundo, que disputaba su cuarta semifinal consecutiva en el desierto californiano. Fue una dura derrota para Swiatek, que no gana un torneo desde el último Roland Garros. Fue un partido de alta intensidad técnica y mental, disputado con alta calidad por ambas jugadoras, y Andreeva demostró carácter en el desempate del primer set. Lo dominó y se lo llevó con un duro 7-1.
Reaccionó con orgullo Swiatek, que pretendía convertirse en la primera jugadora capaz de lograr un triplete en Indian Wells, e igualó el choque por la vía rápida, con un incuestionable 6-1. Fue en ese momento cuando Andreeva se tomó un momento para regresar a los vestuarios y recuperar lucidez. Logró una valiosa rotura en el primer juego del tercer set, al tiempo que Conchita Martínez le animaba desde la grada.
No concedió bola de rotura alguna y logró otro break para ponerse 4-1 arriba frente a Swiatek. La polaca intentó darse una oportunidad, para Andreeva no tembló y sentenció con un 6-3 para regalarse la oportunidad de conquistar su segundo WTA 1000 consecutivo.
El feo gesto de Swiatek con un recogepelotas
La número dos del mundo no supo bien encajar la derrota ante Andreeva y durante el partido perdió los nervios delante de un recogepelotas que bien pudo salir muy mal parado. Swiatek sacó toda su furia a pasear golpeando una pelota con bote hacia la zona de su palco, pasando muy cerca de este chico que se mantuvo estoico y que a punto estuvo de sufrir un auténtico bolazo de la polaca.