El peso medio ya tiene nuevo contendiente

París fue el escenario de una fantástica noche UFC. Con la 'ciudad de la luz' como escenario, los luchadores locales dieron un paso al frente para pasar por encima de los brasileños del Fighting Nerds en el octógono y, lo que es más importante, dar un impulso a sus candidaturas en sus respectivas categorías. Así, Narrourdine Imavov se hizo con el triunfo en el combate estelar al imponerse por decisión unánime (50-45, 49-46 y 49-46) a Caio Borralho, victoria que le sirve para situarse como el próximo contendiente para el título del peso medio. Y menos problemas tuvo un Benoit Saint-Denis que noqueó a Ruffy en el segundo asalto.

Vamos por partes. Con Francia expectante y deseosa por ver a sus luchadores en acción, Imanov saltó al octógono con una determinación a prueba de cualquier ataque rival; tanto es así que el gran arma de Caio –sus patadas– quedaron en nada desde un primer asalto en que no hubo derribos y la pelea se centró en el agarre. La realidad es que pasaron pocas cosas; eso sí, al brasileño se le veía algo lento, lo que le llevó a 'comerse' una buena patada frontal del galo.

La dinámica no cambió en los dos siguientes asaltos. Un derechazo, un gancho... Aunque Borralho intentaba responder la realidad es que para cuando se cerró el segundo asalto ya tenía el rostro marcado. En el tercero sí que hubo respuesta de Caio, pero el intercambio volvía a salirle caro al 'visitante', quien se llevó un golpe que le hizo una herida cerca del ojo.

Sabedor de que las cosas no iban bien para él. Borralho apretó los dientes en el cuarto round, pero en los intercambios siempre era él quien terminaba retrocediendo ante el empuje de su rival; eso sí, ambos se mantenían en pie y sin dar sensación de que pudieran ser derribados.

El quinto fue un sálvese quién pueda. Ambos golpearon con todo, pero a ninguno le bastó para tumbar a su rival. Caio lo intentó con una ráfaga de golpes, pero Imanov aguantó sin demasiados problemas. El francés ya había hecho el trabajo en los anteriores asaltos y ahora le bastaba con tener una actitud algo más defensiva. Con su triunfo confirmado, dejó claro a Dana White cuál quiere que sea su próximo paso con la compañía. "Me he fastidiado el tendón del pie derecho, me dolía muchísimo, por eso no he podido lograr la finalización. Soy el siguiente, Dana. Este tipo lleva 10 años sin ser batido y le he derrotado", reclamando su oportunidad.

Saint-Denis tampoco perdona

Aunque Benoit Saint-Denis llegaba sin grandes expectativas a la noche parisina, la realidad es que terminó levantando al público de sus asientos; y es que no solo batalló con todo contra Mauricio Ruffy, sino que en el segundo asalto acabó con él. Este triunfo hace que el nombre del francés vuelva a sonar para tener una oportunidad titular en el peso ligero.