El principio del final de Ricky Rubio

Uno de los momentos del año en el deporte español es sin duda alguna el retorno de Ricky Rubio al baloncesto profesional. Tras un año fuera de las pistas desde que salió del Barça y muchas dudas sobre que iba a ser de él, especialmente tras una descarnada entrevista con Jordi Évole, todo eran dudas en torno al veterano base español. Sin embargo, decidió dar un paso más y despedirse donde todo empezó, en el Joventut de Badalona, donde tendrá un año para reconciliarse con el baloncesto y volver a casa veinte años después de aquel recordado debut en la Penya siendo todavía un adolescente.

Ricky ha sido presentado con el equipo de Badalona y como acostumbra, se ha abierto en canal de cara a este paso tan importante para él, cuando no se esperaba que fuera a estar de nuevo sobre el parqué. El nuevo 9 verde ha confesado que viene con "una ilusión que no había sentido nunca", más aún después de acercarse al joven proyecto: "He visto que se quieren mejorar las cosas y tengo ganas de empujar para sumar, hacer que el club esté donde se merece. Deportivamente, intentaré aportar mucho y, sobre todo, ayudar a los jóvenes. Siempre me ha ido bien se un mentor y es el momento de hacerlo en casa".

Reencontrarse consigo mismo

Tras un año muy duro en el Barça todo se paró. Necesitaba dar un paso al lao y eso hizo, y lo pasó mal, pues vivió una montaña rusa emocional, de la que sin embargo ha salido bien, pues fue enriquecedor para él, aunque el proceso "fue difícil". Eso sí, no esconde que vio muy cerca la retirada, pero en un momento dado hizo 'click' y desde ese momento hasta firmar el contrato todo fue muy fácil. "En mayo entró en mí una semilla, en junio empezaron las conversaciones hacia un objetivo que no sabía como iba a ir hasta hace dos o tres semanas, que vi claramente cómo la ilusión crecía, que el que quería volver era yo".

Jugar en el Joventut era la única opción que tenía, pues sus sentimientos así se lo decían. Ya lo quiso hacer en 2024, pero no estaba preparado y tuvo que esperar a estar preparado para afrontar la presión de nuevo, como si está ahora. "Nunca había estado tanto tiempo parado. Rendiré al máximo nivel que tenga en este momento. Solo me importa lo que me exija yo y el equipo, no los demás".