Willy Hernagómez, relegado... y encantado
Los minutos del pívot madrileño no han mejorado en la rotación de Xavi Pascual con respecto a lo que ya tenía, pero asegura estar contento de lo que le está exigiendo el nuevo entrenador del Barça

"Aquí el que no defiende no juega", decía hace unos días Joel Parra sobre las primeras semanas de Xavi Pascual al frente de la nave barcelonista. El nuevo técnico del Barça ha cambiado la dinámica gracias a esa defensa y sigue sin encajar más de 80 puntos después de tres semanas de competición, en las que sólo ha sufrido una derrota.
El técnico de Gavá ha mostrado su confianza en los pesos pesados (Tornike Shengelia, Will Clyburn o Kevin Punter), que han mejorado con él, pero pese a que sigue demostrando partido a partido ser el mejor pívot que hay en la plantilla, al que le ha cambiado poco el panorama es a un Willy Hernangómez que aparece como octavo o noveno hombre en la rotación. Y eso que sus números, por regla general, están entre los mejores cuando está en pista. Para Pascual la prioridad es la defensa y ahí siempre ha tenido más carencias el pívot madrileño.
Pese a todo, las palabras de del mayor de los Hernangómez hacia su técnico son de elogio y asegura estar mejorando con él en este tiempo. A la vez de que ganan partidos, lo que también le ayuda a llevarlo todo mucho mejor. "Habrá días que juegue menos o más, pero lo importante es que estemos consiguiendo victorias como lo estamos haciendo. Hay que estar siempre preparados, siempre positivos... Estamos creciendo mucho como equipo y tenemos que seguir trabajando muy duro", afirmaba el ex de los Pelicans o lo Knicks.
Pascual cambia la mentalidad de los jugadores del Barça
El capitán de la selección española reconocía en Sport que todos se han concienciado y que entrenan con mayor perseverancia que antes. "Estamos intentando seguir la filosofía de Xavi (Pascual), trabajando súper duro y entrenando muy bien. Estamos compitiendo en cada entrenamiento, creciendo, tenemos mucha estructura. Cuando se trabaja bien y se tiene esa constancia y disciplina, al final van a llegar los resultados. Eso sí, siendo conscientes de que es muy difícil y de que nos queda mucho por mejorar. El camino es el que estamos haciendo, el del trabajo", añadía el madrileño, quien dejaba claro que "el trabajo, la disciplina y la confianza" en el grupo es "el único camino".

A sus 31 años, Willy se ve con capacidad de mejora y, por ello, cree que la aportación de un técnico tan meticuloso y táctico como Pascual le puede ayudar mucho. De hecho, ya considera que lo está haciendo. "A nivel individual estoy muy contento, aprendiendo muchísimas cosas cada día, intentando darlo todo en cada entrenamiento para mejorar. Sé las cosas que tengo que mejorar, lo mucho que me queda, y estoy encantado de cómo me están apretando en cada entrenamiento para mejorar y llegar a ser el mejor jugador que pueda ser", sentencia el jugador formado en la cantera del Real Madrid.