Betis-Eibar: La pedrea ya le sabe a poco

Despide 2018 el Betis con ilusiones renovadas, en su mejor momento de la temporada (porque ha sabido equlibrar brillo y resultados) y con todos los objetivos, al menos, encarrilados. Vivo en la Copa del Rey y en la Europa League (con eliminatorias, al menos, a su alcance y más o menos asequibles para plantarse en cuartos y octavos de final, respectivamente), el último arreón del año ha devuelto a los verdiblancos a posiciones europeas, un privilegio que mantendrá solamente con sumar este mediodía (13:00 horas) ante el Eibar. Sería, además, el séptimo partido oficial consecutivo sin perder (en realidad, únicamente cayó en uno de los once más recientes, que serían doce siguiendo con la hipótesis más optimista), aunque el cuadro heliopolitano persigue un broche dorado que refuerce sus aspiraciones y contente a su público, que repletará, según las previsiones, el Estadio Benito Villamarín, gracias al horario, a la promoción del club y al llamamiento realizado esta semana por el presidente, Ángel Haro, para que nadie se quede en su casa o, al menos, con el abono en la cartera.

De vencer, serían cuatro los triunfos seguidos en LaLiga de los de Setién, un premio 'gordo' visto cómo está de pareja la Primera división, con lo que la licencia para soñar estaría expedida con todas las de la ley. El aplazamiento por el Mundialito del Villarreal-Real Madrid, próximo rival en la Avenida de La Palmera, dejaría la cuarta plaza a tiro de pleno, contando con que los de Solari se dejen algún punto por el camino frente a Villarreal y Real Sociedad.

Las cuentas de la lechera, es cierto. Eso sí que es una lotería, pero la ilusión se desbordaría inevitablemente en un Betis que, como hasta ahora, debe dar los pasos de uno en uno, acumulando sensaciones y confianza para que broten su empaque y su pegada, a la espera de que Serra haga otra vez magia y saque la bolita ganadora del bombo invernal.
Para la cita de hoy ante un Eibar tan rocoso como imprevisible, Quique anuncia los cambios justos y necesarios. Puede que, incluso, sólo introduzca el obligado de Tello por el lesionado Junior, que se une a Guardado en la enfermería. Otra baja importante que el Betis suplirá con la polivalencia de un plantel corto, aunque 'enchufado'. Arriba, Sanabria pone ligeramente en entredicho la titularidad de Loren, pero poco más se espera en un once 'on fire'.