El Benito Villamarín reclama una tregua

Este domingo, el Betis disputará su último partido en el Benito Villamarín en una temporada que dio comienzo con las cotas más altas de ilusión que se recuerdan y que acaba con una decepción mayúscula y un clima crispado.
Un buen termómetro de estas emociones cambiantes ha sido el Benito Villamarín, que viene de registrar sus dos peores entradas del curso: 30.561 personas en el 1-1 ante el Espanyol de hace 15 días y 28.475 espectadores contra el Villarreal, el 7 de abril (entre medias, el día 21, 42.508 béticos vieron la derrota ante el Valencia). El dato contrasta con los registrados en otras fases de una campaña en la que el Betis ha batido el récord de asistencia de toda su historia: los 57.123 espectadores de la ida de las semifinales de Copa del Rey. También superó la barrera de los 50.000 ante el Real Madrid (54.187), el Barcelona (54.172), el Sevilla (53.451), el Athletic (51.093) y el Atlético (50.864); y rebasó los 45.000 siete veces.
Para que el clima de mañana, ante el Huesca, se acerque más a estos últimos ejemplos, el club ha reclamado una tregua y ha puesto en marcha una promoción por la que todos los béticos pueden comprar dos entradas a 20 euros cada una.
La idea es enterrar las rencillas y acabar la temporada con un buen ambiente que haga más justicia con el rol que tiene en Europa el coliseo de la Palmera, uno de los 50 estadios de todo el continente con más público en los últimos 15 años, entre 2003 y el pasado 2018.
Así lo atestigua un reciente estudio del Observatorio de Fútbol del Centro Internacional de Estudios del Deporte (CIES), que sitúa al campo heliopolitano en el puesto número 50 con una media de 35.664 aficionados por partido, balance que subirá de una manera significativa cuando se tengan en cuenta los datos de este 2019; pues en el estudio sólo cuenta un año desde la última remodelación que posibilitó aumentar el aforo desde poco más de 50.000 a un total de 60.720.
Con todo, el estadio bético está por delante de otros históricos de LaLiga como el Athletic o el Sevilla y es el cuarto feudo de España sólo por detrás de los del Barcelona, el Real Madrid, el Atlético y el Valencia.
La clasificación la encabeza el Borussia de Dortmund, con un promedio de 80.230 hinchas; seguido del Manchester United, con 75.218 y del propio Barça, con 74.874 espectadores de media.
Por países, el primer puesto es para la Bundesliga de Alemania y el podio está completado por la Premier inglesa y LaLiga.
Un buen termómetro de estas emociones cambiantes ha sido el Benito Villamarín, que viene de registrar sus dos peores entradas del curso: 30.561 personas en el 1-1 ante el Espanyol de hace 15 días y 28.475 espectadores contra el Villarreal, el 7 de abril (entre medias, el día 21, 42.508 béticos vieron la derrota ante el Valencia). El dato contrasta con los registrados en otras fases de una campaña en la que el Betis ha batido el récord de asistencia de toda su historia: los 57.123 espectadores de la ida de las semifinales de Copa del Rey. También superó la barrera de los 50.000 ante el Real Madrid (54.187), el Barcelona (54.172), el Sevilla (53.451), el Athletic (51.093) y el Atlético (50.864); y rebasó los 45.000 siete veces.
Para que el clima de mañana, ante el Huesca, se acerque más a estos últimos ejemplos, el club ha reclamado una tregua y ha puesto en marcha una promoción por la que todos los béticos pueden comprar dos entradas a 20 euros cada una.
La idea es enterrar las rencillas y acabar la temporada con un buen ambiente que haga más justicia con el rol que tiene en Europa el coliseo de la Palmera, uno de los 50 estadios de todo el continente con más público en los últimos 15 años, entre 2003 y el pasado 2018.
Así lo atestigua un reciente estudio del Observatorio de Fútbol del Centro Internacional de Estudios del Deporte (CIES), que sitúa al campo heliopolitano en el puesto número 50 con una media de 35.664 aficionados por partido, balance que subirá de una manera significativa cuando se tengan en cuenta los datos de este 2019; pues en el estudio sólo cuenta un año desde la última remodelación que posibilitó aumentar el aforo desde poco más de 50.000 a un total de 60.720.
Con todo, el estadio bético está por delante de otros históricos de LaLiga como el Athletic o el Sevilla y es el cuarto feudo de España sólo por detrás de los del Barcelona, el Real Madrid, el Atlético y el Valencia.
La clasificación la encabeza el Borussia de Dortmund, con un promedio de 80.230 hinchas; seguido del Manchester United, con 75.218 y del propio Barça, con 74.874 espectadores de media.
Por países, el primer puesto es para la Bundesliga de Alemania y el podio está completado por la Premier inglesa y LaLiga.