Si hay un futbolista que está sobresaliendo sobre el resto en este arranque de temporada en el Betis es Nabil Fekir. El jugador francés está brillando a un nivel que no había mostrado en sus más de dos años como bético y está paliando en parte los problemas que están atravesando otras de las grandes estrellas verdiblancas: Sergio Canales.
Pellegrini está aprovechando esta situación y el hecho de que Fekir no se vaya con su selección y pueda 'descansar' un par de semanas al mes en los parones obligados por la FIFA. Es el que más juega, con más de dos partidos de ventaja sobre el siguiente y, a diferencia de años anteriores, es el jugador de ataque menos sustituido.
Pero cuando regrese del parón se va a encontrar con un problema. Lleva cuatro cartulinas amarillas y está a una sola amonestación de perderse un duelo. Alavés. Rayo, Valencia y Atlético son los próximos rivales antes de un derbi del que también deberá estar muy pendiente.
Pese a haber subido su nivel y a que el Betis está situado entre los equipos que pelean por Europa en los últimos años, a Fekir no se le ha respetado desde que llegó a LaLiga como sí se hace con otras estrellas del fútbol español.
No le pitan todas las faltas que le hacen y sus rivales no ven todas las cartulinas que él provoca. Por el contrario, en estos poco más de dos años ha sido expulsado tres veces y siempre ha superado las cinco amarillas por temporada, algo impropio en un jugador de ataque.
En el presente campeonato, ya ha visto cuatro amarillas, al menos dos de ellas más que discutibles. Y está al borde de una sanción que otros no verán nunca.
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