Poco más de 72 horas entre la paliza de Villarreal la 'final' ante el Mallorca. Eso es lo que ha tenido el
Sevilla FC para recuperarse de un partido que les exigió mucho y en el que salvaron un punto in extremis. Un empate importante porque les acerca un poco más a una Champions que está a sólo tres puntos y para la que podían estar clasificados antes de jugar sin el Real Betis no gana hoy en Mestalla.
Aunque ya estuviera el objetivo logrado, el equipo de Lopetegui se juega mucho. No ha estado bien en los últimos partidos, en los que se nota un bajón físico importante en una temporada en la que estuvo mucho tiempo peleando, incluso, por el campeonato. Y su público se lo recrimina. Ante el Mallorca, por tanto, deben dar una buena imagen y ganar, como todos los aficionados esperan.
El único problema es que el
Mallorca se juega más, porque de no vencer se habrá complicado mucho la salvación. Y vendrá a por todas. Como también lo hará un viejo enemigo sevillista, el mexicano Javier Aguirre, que lideraba batallas en otro tiempo.
Será, por tanto, un partido en el que, como todos en este final, hay mucho en juego y en el que pueden pasar muchas cosas.
Éste es
el