Auroras boreales sorprendentes iluminan España

Una actividad geomagnética excepcional el pasado 11 de noviembre, ha permitido que el fenómeno, habitual en zonas polares, se observe incluso en el sur de la península

Auroras boreales sorprendentes iluminan España
Auroras boreales - Cordon Press

Durante la madrugada reciente, en varias regiones de España se pudieron observar auroras boreales, un fenómeno poco frecuente en latitudes tan bajas, debido a una intensa tormenta geomagnética. Esta actividad solar inusual se relaciona con múltiples eyecciones de masa coronal emitidas desde la región AR 4274 del Sol, responsable de una erupción de clase X5.1, que fue la que afectó significativamente la magnetosfera terrestre.

Las partículas energéticas liberadas durante este episodio provocaron emisiones luminosas visibles incluso en zonas alejadas de los polos.

Los sistemas de monitoreo espacial indicaron que el fenómeno se produjo bajo una tormenta geomagnética de categoría G4, uno de los niveles más altos en la escala de intensidad solar. La magnitud del evento permitió que las auroras se apreciaran no solo en el norte de la península, sino también en territorios del sur, como la provincia de Almería, donde cámaras especializadas detectaron tonalidades rojizas cercanas al horizonte.

En Andalucía, el Observatorio de Calar Alto, situado a más de 2.100 metros de altitud, captó una aurora roja durante varias horas. A pesar de la presencia de nubes y de la luz de la luna, los sistemas ópticos confirmaron la intensidad del fenómeno, equiparable a otros episodios similares registrados en mayo del año pasado. Los primeros análisis sugieren que esta serie de erupciones podría estar vinculada a un GLE (Ground Level Enhancement), un incremento de partículas detectado a nivel del suelo que solo se ha documentado en contadas ocasiones a lo largo de cada ciclo solar. Este comportamiento refleja la energía liberada por la actividad de la región solar implicada.

Expertos del Instituto de Astrofísica de Canarias y de la Agencia Espacial Europea (ESA) continúan evaluando la evolución de la tormenta geomagnética. Desde la ESA se señaló que el planeta ya ha recibido dos impactos de nubes de plasma y se espera la llegada de un tercero, cuya interacción con los anteriores podría prolongar las perturbaciones y aumentar la probabilidad de que se repitan auroras en los próximos días.

Aunque el espectáculo visual es extraordinario, los especialistas advierten que no se prevén efectos graves sobre la vida cotidiana. Sin embargo, sí podrían producirse alteraciones puntuales en comunicaciones, navegación por satélite y vuelos cercanos a regiones polares.

Para los aficionados a la observación del cielo, estas condiciones representan una oportunidad única para contemplar auroras boreales, especialmente desde zonas oscuras y orientadas hacia el norte, donde las luces se vuelven más intensas y apreciables a simple vista.