José Antonio Rivero3 min lecturaEn un reciente desarrollo legal, el Juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla ha decidido archivar la causa relacionada con la muerte por electrocución de Álvaro Prieto, un joven originario de Córdoba. El trágico incidente tuvo lugar el 12 de octubre en las vías exteriores de la estación de trenes de Santa Justa, en Sevilla. La resolución del juzgado se basa en la consideración de que este lamentable suceso fue un accidente.
El auto fechado el 19 de diciembre señala que, según las diligencias de instrucción llevadas a cabo, "no existen indicios de la comisión de ilícito penal alguno, y en el que intervinieran de forma intencionada o imprudente terceros en el fallecimiento" del joven. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) informó sobre la conclusión del juzgado respecto a la investigación.
El informe judicial hace referencia a diversas diligencias practicadas, entre las que se incluyen el levantamiento judicial del cadáver, la inspección ocular, la toma de muestras y vestigios por parte de la Policía Científica, la autopsia, la recopilación de grabaciones de cámaras de seguridad y la declaración de testigos. El juez recibió recientemente el informe de autopsia del cadáver, que establece que la muerte fue accidental debido a la electrocución.
El joven Álvaro Prieto, procedente de Córdoba, falleció el mismo día de su desaparición, el 12 de octubre de 2023. Los informes médicos forenses, tanto en el levantamiento del cadáver como en la autopsia, respaldan esta información. La Policía Nacional también presentó atestados relacionados con el caso, y las grabaciones de las cámaras de seguridad del área circundante fueron recopiladas para su análisis.
El cadáver fue encontrado cuatro días después, el 16 de octubre, cerca del lugar donde ocurrió el incidente. El juzgado, tras revisar toda la información disponible, determinó que "no existen indicios de la perpetración de hecho delictivo alguno", llevando al acuerdo de archivar las actuaciones.
Este cierre de la causa destaca la importancia de las diligencias judiciales y la colaboración de diversas entidades en la esclarecimiento de los hechos. La conclusión de que la muerte fue accidental proporciona una respuesta a los familiares y la comunidad afectada, aunque no disminuye el dolor de la pérdida. Este caso pone de relieve la necesidad de investigaciones exhaustivas para llegar a conclusiones basadas en la evidencia y la justicia.