Es el mejor chiringuito de España y está en el norte de la península

Cuando llega el verano, lo más normal, el lugar por antonomasia al que acude en masa la población es la playa. Hay muchos que creen que está sobrevalorada, que no es para tanto. En parte tienen razón porque como todo, tiene cosas negativas. La primera, aunque eso depende de la playa que sea, pero sería la arena. Hay quienes odian la arena, porque les molesta que se les pegue. También destacan que para comer en la playa les resulta muy incómodo, sobre todo si hay viento, debido a que la arena se mete en la comida y mastican granos de arena prácticamente. Pero claro está, también hay quienes siguen defendiendo que la playa es un lugar muy especial, sin importar de que playa se esté hablando, en qué comunidad esté o cuales sean sus vistas. Y también tienen parte de razón, porque en la playa se puede disfrutar mucho.

Si no está muy llena se puede jugar a las palas, que es casi el deporte oficial del verano, o al fútbol en la orilla. También los baños en el mar son únicos, incomparables con un río o con una piscina. Eso sí, lo que todo el mundo está de acuerdo, donde no hay discusión, es que el mejor sitio de la playa es el chiringuito. Si hay un chiringuito cerca del lugar, en el que se pueda comer, casi nadie dice que no a ir. En la todo el país hay miles de playas con otros tantos de miles de chiringuitos. Sin embargo, lo que muchos no saben, es que uno de los mejores del país no está entre los grandes destinos turísticos que todos piensan, está en el norte, concretamente en Cantabria.

Lejos de la masificación

Uno de los puntos negativos que, sobre todo a nivel nacional, se destaca del turismo de playa es la cantidad de gente que suele ir, que en muchas ocasiones no te permite disfrutar siquiera de la playa. Es por eso por lo que es una gran idea ir a uno de los sitios que quizá no tiene tanto nombre, pero que si tiene muchos beneficios. El norte de España es uno de los lugares favoritos para acudir dentro del turismo nacional, que busca huir del calor. Y allí, situado en la playa de Oyambre, cerca de Ruiloba se encuentra El Rayo Verde. Se trata de un lugar único ya que además de un lugar perfecto para disfrutar de comida tradicional pero traídos a la actualidad, se encuentra rodeado de naturaleza salvaje, con vistas a la Ría de la Rabia. Y es que a nivel gastronómico se puede disfrutar desde un atún rojo, típico de las zonas costeras del norte, hasta unas gyozas, propias de la comida asiática.