La práctica turística que puede suponer una multa de hasta 500€ en Benidorm

España es uno de los destinos preferidos de buena parte de Europa cuando se acerca el verano. De hecho, lo es tanto que hay muchos de esos turistas que al final se acaban quedando a vivir aquí. Sobre todo, destacan los británicos y los alemanes, que en algunas ciudades han hecho comunidades de sus países realmente grandes, casi barrios enteros de turistas que se quedaron a vivir. Hay muchas zonas en las que ocurre esto, como puede ser Marbella, donde sobre todo también llegaban en su momento muchos magnates rusos que aprovechaban el turismo de lujo de la localidad malagueña. Pero sin duda, si existe una localidad española que se caracteriza por tener población tanto alemana como británica hasta el punto de tener un amplio porcentaje todo el año, esa es Benidorm.

La localidad valencia lleva muchos años siendo uno de los puntos más importantes del turismo internacional en España, ya que, si se cuentan solo los británicos, son más de 800.000 personas las que llegan cada año. Se trata del lugar perfecto para el turismo, ya que todas las infraestructuras están pensadas para eso. Aunque también se ha solido caracterizar por un turismo de personas más mayores, en los últimos años han llegado algunas más jóvenes que se están aprovechando de uno de los servicios que ofrece este maravilloso enclave de la Costa Blanca. Y por eso el ayuntamiento ha avisado de que las multas podrían llegar a los 500€.

Una moda por toda la ciudad

Teniendo en cuenta que muchas de las personas, como se ha mencionado, son de avanzada edad, uno de los servicios más frecuentes son los scooters eléctricos de cuatro ruedas. En la localidad hay hasta 4 empresas que los alquilan para todo el día, sobre todo destinados a quienes tiene problemas de movilidad. Sin embargo, el ayuntamiento ha tenido que tomar medidas porque se estaba tratando de una costumbre que todos los turistas estaban llevando y eso estaba generando problemas para la circulación por toda la ciudad.

De manera que la ordenanza municipal ha establecido que para poder utilizarlas es necesario ser mayor de 55 años o tener una discapacidad para caminar. De igual manera las empresas que las alquilan tienen la obligación de exigir un depósito en efectivo y de hacer firmar a los clientes un contrato donde se detallen las normas estrictas de su uso. Entre esas normas destacan contar siempre encima con el contrato y no subir pendientes que superen el 5% del desnivel.