El árbitro que pitó más finales: historia del juez más influyente de Europa

El italiano Pierluigi Collina es considerado por muchos el mejor colegiado de todos los tiempos, siendo especialmente recodadas sus actuaciones en la final de la Champions de 1999 o el Mundial de 2002

El árbitro que pitó más finales: historia del juez más influyente de Europa
El italiano Pierluigi Collina. - CORDON PRESS

La figura del árbitro siempre está en el centro de la polémica. Clubes, jugadores y aficionados suelen expresar sus quejas contra ellos por las decisiones contrarias a sus equipos y rara vez son noticia por recibir elogios. Por ello, resulta significativo que entre tantas críticas a los colegiados existiese uno que logró generar un consenso prácticamente universal. No se trata ya de saber si fue el mejor árbitro de todos los tiempos o no, pero de lo que no cabe duda es de que Pierluigi Collina consiguió ser el más influyente de todos y aún hoy día sigue teniendo un papel clave.

Estudiante de Económicas, el italiano, nacido el 13 de febrero de 1960, comenzó a jugar al fútbol como central, pero su decepción al ver cómo el juego sucio imperaba en las categorías de aficionados decidió colgar las botas y coger el silbato. En 1991 debutó en la Serie A y en 1995 ya había conseguido ser internacional, retirándose en el año 2005.

A lo largo de esa década, tuvo la oportunidad de dirigir partidos de suma importancia, siendo especialmente recordado por su actuación en la final de la Champions disputada en 1999 en Barcelona entre el Bayern Múnich y el Manchester United. Dicha final está considerada una de las más emocionantes de la historia, porque en el minuto 90 ganaban los alemanes 1por la mínima y en el 91’ y el 93’, los ingleses le dieron la vuelta al marcador. La imagen de Collina intentando que los jugadores del Bayern se levantaran del césped tras el segundo gol de los ‘reds devils’ dio la vuelta al mundo.

Además, el ex colegiado natural de Bolonia pitó la final del Mundial de Corea del Sur y Japón en 2002, en la que Brasil se impuso por 2-0 a Alemania. Ese mismo año, fue nombrado 'Mejor Árbitro del Año' de la FIFA por sexto año consecutivo. También dirigió partidos en el Mundial de 1998 y las Eurocopas de 2000 y 2004, aunque su primera gran aparición a nivel internacional fue en los Juegos Olímpicos de 1996, donde impartió justicia en la final en la que Nigeria derrotó a Argentina (3-2).

Su última final continental, por su parte, fue la que el Valencia ganó al Olympique de Marsella en la Copa de la UEFA de 2004. Un año después, su último partido en Champions fue en El Madrigal, en una duelo de la fase previa entre Villarreal y Everton (2-1).

Sigue al frente del arbitraje en la FIFA

Conocido por su excepcional gestión de partidos, su estricto cumplimiento de las reglas y su capacidad para comunicarse eficazmente con los jugadores, Collina, con su característica alopecia, fue imagen incluso de la portada del videojuego 'Pro Evolution Soccer 3'.

A los 45 años optó por retirarse, pero siguió ligado al arbitraje e influyendo en el mismo. La IFFHS le designó como el mejor arbitro de todos los tiempos, pero no estuvo mucho tiempo alejado del mundo del fútbol. En 2010 fue nombrado jefe de árbitros de la Federación de Fútbol de Ucrania y posteriormente se convirtió en el Director de Arbitraje de la UEFA cargo que dejó en 2018. También ha desempeñado funciones de asesoramiento y supervisión de árbitros a nivel nacional e internacional y actualmente es el presidente del Comité de Árbitros de la FIFA. Partidario de la instauración del VAR desde el primer momento, Collina también publicó en 2008 el libro 'Mis reglas del juego. Lo que el fútbol me ha enseñado en la vida'.