Un doloroso adiós en el Athletic Club

El Athletic Club sigue asimilando la ausencia de Óscar de Marcos, uno de los futbolistas más queridos y representativos de su filosofía. Su reciente homenaje en Laguardia no solo cerró una etapa brillante, también evidenció el profundo vacío que deja en el vestuario, en la afición y en la historia rojiblanca

Un doloroso adiós en el Athletic Club
Un doloroso adiós en el Athletic Club - Cordon Press

El exfutbolista del Athletic Club, Oscar de Marcos, vivió este martes un día muy especial en su pueblo natal, Laguardia, donde fue homenajeado en un acto previo al partido amistoso entre el Deportivo Alavés y el Athletic Club. Este reconocimiento reafirma su importancia y legado en el club rojiblanco, del que fue un jugador clave durante años.

El homenaje a Oscar de Marcos congregó a numerosos aficionados y tuvo lugar en el campo de Laguardia, que lleva el nombre del ex lateral rojiblanco. El acto contó con la entrega de la makila, bastón de mando tradicional del País Vasco, que le fue entregado por el presidente del Luzerna, club riojano alavés, como símbolo de respeto y reconocimiento a su carrera deportiva y su compromiso con los valores del Athletic Club.

Oscar de Marcos entró al terreno de juego en medio de un pasillo formado por jugadores de los tres clubes implicados en la ceremonia, reflejando la admiración que despierta en el fútbol vasco. Su presencia y su trayectoria son un ejemplo vivo de la filosofía del Athletic Club, que valora la fidelidad y el compromiso con la identidad local.

El propio Oscar de Marcos expresó su felicidad por el homenaje y reflexionó sobre su relación con el fútbol y el Athletic Club. “Han sido unas vacaciones más largas de lo habitual, llevo todo el mes en Laguardia disfrutando de la familia”, comentó, mostrando su lado más personal. En cuanto a su retirada y la nostalgia que pueda sentir, afirmó: “De momento no me ha dado tiempo a echar de menos el fútbol, seguramente sea cuando les vea el primer partido en San Mamés, pero hasta que me muera echaré de menos jugar en San Mamés”.

La conexión con el Athletic Club sigue viva en Oscar de Marcos, quien además mostró su apoyo al actual equipo y sus nuevos integrantes. Destacó el papel de Mikel Jauregizar, un joven jugador que lleva el dorsal ‘18’, el mismo que él lució con orgullo durante tantas temporadas: “Me hace ilusión, lo defiende a las mil maravillas”. También valoró positivamente la incorporación de Jesús Areso, joven futbolista que cubrirá su antigua posición en el Athletic Club. Sobre Areso, De Marcos dijo que es “un refuerzo importante para un año ilusionante”, palabras que anticipan confianza en la continuidad y el futuro del club rojiblanco.

Oscar de Marcos, un emblema del Athletic Club

El homenaje a Oscar de Marcos en Laguardia no solo es un reconocimiento a su carrera deportiva, sino también un testimonio de los valores que representa para el Athletic Club. Su compromiso, su trayectoria y su humildad lo convierten en un auténtico ejemplo para la afición y para los jugadores que hoy visten la camiseta rojiblanca. El Athletic Club sigue echando de menos a Oscar de Marcos, pero sabe que su legado permanece intacto.