Ronaldinho, 22 años después

21 de julio de 2003. Un día que pasará a la historia del FC Barcelona por el fichaje de Ronaldinho. Ante la presencia de un Camp Nou semivacío ante una grada de preferencia completa de aficionados que no sabían en ese momento la importancia de aquella presentación, el campeón del Mundial 2002 se tomaba sus primeras fotos como jugador culé. Un traspaso de 30 millones de euros que tuvo una contraprestación claramente ganadora mediante títulos, imagen de club y una sonrisa que más de dos décadas después, sigue siendo imborrable.

Ronaldinho le cambió la vida al Barcelona

Ronaldinho llegó a un Barcelona que andaba en una crisis institucional y deportiva tras los exitosos años de Cruyff a principios de los noventa. Florentino Pérez acababa de desembarcar en el Real Madrid, y con fichajes galácticos, sobre todo con el de Figo, habían puesto la puntilla a un club que vagaba entre la mediocridad. Sin embargo, y a raíz del nombramiento de un joven Joan Laporta como presidente, la entidad dio un giro, sobre todo, tras la incorporación de Ronaldinho.

Tras jugar a un gran nivel en Francia con el PSG, el club blaugrana apostó por sus servicios, y desde el primer día, con un encuentro histórico disputado ante el Sevilla de madrugada para garantizar la participación del brasileño, el '10' demostró que estaba hecho de otra pasta. Balón de Oro en 2005, el carioca tuvo un reinado efímero pero espectacular. En el año 2006, junto a su socio Eto'o, 'Dinho' lideró al Barça hacia la conquista de su segunda Champions League de su historia, esta vez con una final histórica en París frente al Arsenal.

Su herencia en Can Barça

'Roonie' llegó a la cima del fútbol mundial a la misma velocidad que cayó de la misma. Rodeado siempre de un ambiente de fiesta, el brasileño tuvo un mal final en el Camp Nou, marcado por sus salidas nocturnas y su influencia en el vestuario, entre ellos, a un joven Messi. Guardiola, quien acababa de llegar al banquillo, quiso cortar de raíz con esta situación, pidiendo la marcha del crack. Ronaldinho se tuvo que ir entonces al Milan, y a partir de ahí, nada fue lo mismo.

Desde 2003 a 2008, Ronaldinho levantó cinco títulos con el Barcelona: dos Ligas españolas (2004/05 y 2005/06), dos Supercopas de España (2005 y 2006), y una Champions League (2005/06). Además de ello, ganó el Balón de Oro en 2005, y se ganó un hueco en el corazón de los culés en particular, y del mundo del fútbol en general, siendo vitoreado incluso en el Bernabéu. 22 años después, su huella sigue estando vigente.