Emery, serio candidato
Unai Emery ha logrado enderezar el rumbo del Aston Villa, que tras su resurgir en Europa se perfila como uno de los candidatos serios al título
El conjunto inglés sumó su tercer triunfo consecutivo tras imponerse 0-2 al Feyenoord en Róterdam gracias a los tantos de Emiliano Buendía y John McGinn. Aunque el equipo de Unai Emery no ofreció su versión más brillante, volvió a demostrar que ha dejado atrás su mal arranque de temporada.
Emery empieza a enderezar el rumbo
El comienzo del Aston Villa fue titubeante: cinco jornadas de Premier League y una eliminatoria de Copa de la Liga sin conocer la victoria. Incluso llegaron a acumular cuatro partidos sin marcar un solo gol. Sin embargo, el panorama ha cambiado radicalmente. En apenas una semana, los de Birmingham encadenaron tres triunfos: primero ante el Bolonia, luego frente al Fulham y ahora frente al Feyenoord en la Europa League.
El duelo en el De Kuip fue un reto exigente. El conjunto neerlandés dominó gran parte del primer tiempo y generó las mejores ocasiones. Bizot, bajo los palos en lugar de Emiliano “Dibu” Martínez —quien fue anunciado como titular pero se cayó a última hora—, se convirtió en el héroe inesperado con varias intervenciones decisivas.
Primer tiempo de sufrimiento
A pesar de tener más posesión, el Villa se vio desbordado en varias fases del partido. Ueda fue una amenaza constante con remates de todos los colores, y hasta un gol suyo fue anulado por falta previa. También Luciano Valente probó fortuna desde lejos, pero nuevamente Bizot respondió con solvencia. El empate a cero al descanso supo a victoria para los ingleses, mientras los hombres de Robin van Persie se marchaban frustrados al vestuario.
La segunda mitad mostró otra cara del equipo inglés. Más compacto atrás y con mayor claridad en ataque, empezó a generar peligro en las transiciones. El argentino Emiliano Buendía fue clave: primero participó en la jugada de Guessand que acabó en el poste y luego firmó un auténtico golazo. En el minuto 61, controló en la frontal y sacó un disparo ajustado imposible para Wellenreuther. Ese tanto descolocó al Feyenoord, que tardó en reaccionar. Cuando lo hizo, ya era tarde.
McGinn sentencia
A diez minutos del final, una contra iniciada por Donyell Malen dejó el balón suelto en el área. Allí apareció el capitán John McGinn, que no perdonó. El escocés atraviesa un gran momento, con goles ante Bolonia, Fulham y ahora Feyenoord. Con el 0-2, el Villa aseguró su segunda victoria europea y confirmó su buen presente.
Un regreso con historia
El triunfo tuvo un simbolismo especial: el Aston Villa regresaba al estadio donde, en 1982, conquistó la única Copa de Europa de su historia. Cuarenta y tres años después, De Kuip volvió a sonreírles.
Mientras tanto, el Feyenoord encadena dos derrotas en la fase de grupos —ya había caído ante el Braga— y deberá reaccionar pronto si quiere aspirar a la clasificación.