Fernando Mateos5 min lecturaSu abrupta salida del Olympique de Marsella, en el cual sólo ha estado al frente siete partidos, hizo que Marcelino García Toral viviese “unos días complicados” dadas las circunstancias que llevaron a su precipitado adiós. Aunque ya está de nuevo en el mercado y ha vuelto a recibir ofertas, entre ellas una del Sevilla, es imposible no recordar lo sucedido en el club francés.
“Parece irreal que en el 2023 pasen estas cosas. Que un grupo de personas amenacen en su propio despacho al presidente y le digan que tiene que dejar el club y que, si no lo hace, se atenga a las consecuencias no es algo muy normal en el mundo del fútbol. Es imposible generar un proyecto en el Marsella porque los ultras quieren condicionar la forma de actuar y se sienten cómodos en ese ambiente de crispación”, ha confesado el asturiano en Radio Marca.
Pasando ya esa negra página de su carrera deportiva, en la que era su primera experiencia fuera de España, el técnico de Careñes ni mucho menos renuncia a su sueño de triunfar lejos de nuestras fronteras. De hecho, confiesa que le gustaría seguir los pasos de técnicos como Unai Emery, que brilla en la Inglaterra con el Aston Villa.
“La Premier me gusta. Es la NBA del fútbol, es la mejor Liga del mundo. Hemos tenido varias ofertas de Arabia, antes y después de Marsella, pero no las hemos contemplado. Ahora mismo buscamos otro tipo de objetivos. Creo que en España siempre tendré la oportunidad de entrenar, pero se tienen que dar las condiciones. ¿Qué si admiro más ahora a Benítez, Guardiola o Emery? Los admiraba antes de irme. Admiro a todos los grandes profesionales que han demostrado en Ligas diferentes la capacidad de adaptarse y de dar a sus equipos una identidad definida”, explicó.
En este sentido, el ex del Athletic volvió a insistir en las razones que le llevaron a decirle ‘no’ a Víctor Orta. “No sé si era la primera opción porque el Sevilla es un grande y seguro que maneja muchas opciones. Me atraía la idea porque es una espina clavada que tengo, pero para responder a las expectativas tenía que haber unas condiciones que no se dieron. Me ofrecieron un contrato por una temporada que se basaba en objetivos y creímos que no eran las circunstancias idóneas porque, algo que aprendí allí, es que sólo los proyectos estables y duraderos tienen viabilidad. Yo estaba convencido de que el Sevilla es un buen club con buenos futbolistas, pero no estábamos dispuestos a aceptar un trabajo de 7 meses", explicó.
En este sentido, Marcelino dejó claro qué es lo que busca, tras rechazar también el dinero de Arabia Saudí. “Lo que deseo es un proyecto estable, fiable y con futuro que nos permita desarrollar nuestro trabajo con naturalidad y de acuerdo al club. Creo que en España, en LaLiga, sería viable hacer ese trabajo en varios equipos, pero, si tenemos que ir fuera, a cualquier Liga potente de Europa, iremos”, señaló.
Incluso, el asturiano no descarta regresar a Francia. “Sí volvería, pero al Marsella seguro que no. Lo que he visto allí no es para generar un proyecto solvente y con unas bases sólidas, es imposible, pero hay muy buenos equipos”, añadió.
Además, tras desvelar recientemente que su agente llegó a conversar con Luis Rubiales, no escondió que dirigir a España sigue siendo otro de sus grandes sueños. “Siempre lo dije, entrenar a la selección sería un honor. Para cualquier entrenador español sería el máximo reto posible, pero no se ha dado esa circunstancia”, sentenció.