Osasuna profundiza su crisis: el equipo de Lisci se cae en las segundas partes

El CA Osasuna sufrió una nueva derrota en casa frente a la Real Sociedad y sigue hundiéndose en la clasificación tras mostrar, una vez más, una preocupante fragilidad en las segundas partes. Los de Alessio Lisci, incapaces de sostener sus ventajas iniciales, continúan sin dar con la tecla y ya coquetean con el descenso

Osasuna profundiza su crisis: el equipo de Lisci se cae en las segundas partes
Osasuna sufre en las segundas partes - CORDON PRESS

Osasuna sigue sin encontrar el camino y encadenó una nueva derrota en El Sadar en un encuentro que volvió a poner de manifiesto los problemas recurrentes del equipo. La Real Sociedad se impuso por 1-3 en un partido que los donostiarras resolvieron con autoridad en la segunda mitad, aprovechando la inconsistencia del conjunto rojillo. La preocupación aumenta en Pamplona, donde el equipo ha ido perdiendo confianza a medida que avanzaba el campeonato.

La derrota llegó en un contexto ya enrarecido. La petición pública de “espabilar” por parte de Alessio Lisci tras los últimos tropiezos buscaba provocar una reacción inmediata en el vestuario, pero el choque del sábado demostró que las dudas siguen muy presentes. El técnico desembarcó en verano con la intención de implantar un estilo más alegre y dinámico, aunque esa propuesta todavía no ha terminado de aparecer. Osasuna compite por momentos, pero sufre para mantener el nivel durante noventa minutos.

Las segundas partes, un lastre constante

Buena parte de la situación actual se explica por una tendencia repetida: la incapacidad para gestionar las ventajas. Según los registros del campeonato, Osasuna habría sumado 24 puntos si las clasificaciones solo contemplasen las primeras mitades. El dato ilustra la caída en el rendimiento tras el descanso, una circunstancia que se ha convertido en una amenaza permanente para el equipo.

De las trece jornadas disputadas, los rojillos se fueron al intermedio por delante en seis ocasiones. Sin embargo, en ocho partidos el marcador final resultó desfavorable en los segundos 45 minutos. Solo esta dinámica ya ha condicionado la temporada. Villarreal, Celta y Real Sociedad lograron remontar tras verse superados al inicio, un síntoma de desconexión que Osasuna aún no ha sabido corregir.

Los jugadores de Lisci exhiben intensidad y orden durante tramos prolongados, pero el conjunto pierde firmeza cuando el partido entra en una fase más estratégica. La Real Sociedad aprovechó esos minutos de titubeo para controlar la posesión y generar situaciones de peligro que acabaron decidiendo el duelo.

El peor visitante de la liga y dudas crecientes

A las dificultades en la gestión de los partidos se suma otro dato preocupante: Osasuna es el peor visitante de los veinte equipos de la competición, con solo un punto sumado lejos de Pamplona. Esa debilidad fuera de casa, unida al descenso de prestaciones en El Sadar tras un inicio prometedor, ha provocado que el equipo caiga hasta la undécima posición en su propio estadio.

La dinámica negativa alimenta las dudas en torno al proyecto. Aunque todavía hay margen para enderezar la situación, la caída libre de las últimas semanas exige una respuesta inmediata para evitar comprometer de forma prematura el objetivo de mantenerse en la categoría. La reacción debe llegar pronto, especialmente en un calendario que no dará tregua y que obligará a Osasuna a recuperar la solidez defensiva y la continuidad que caracterizaron etapas anteriores.

El próximo compromiso será clave para comprobar si el equipo es capaz de revertir una tendencia que se está prolongando más de lo previsto y que empieza a encender todas las alarmas en Tajonar.