Todo ciclo llega a su fin, y en el caso de Kevin De Bruyne, ese momento ha llegado en el Manchester City. La noticia de su partida ha dejado un vacío en los aficionados del club, de la Premier League y del fútbol mundial. Uno de los jugadores más influyentes de la última década ha decidido cerrar su etapa con los ‘citizens’ al finalizar la temporada.
Desde su llegada en 2015, el centrocampista belga ha sido pieza clave en el éxito del equipo dirigido por Pep Guardiola. Con un legado impresionante de 18 títulos, entre ellos la Champions League, seis Premier League, dos FA Cup y cinco Copas de la Liga, se ha consolidado como el mejor mediocampista de la historia del club y uno de los mejores de la liga inglesa.
En un emotivo mensaje, De Bruyne confirmó su decisión: "Estos serán mis últimos meses como jugador del Manchester City". Con 33 años y tras una carrera brillante en Inglaterra, el belga ahora enfrentará un nuevo desafío en su carrera.
El club ha anunciado que organizará un homenaje especial al término de la temporada para celebrar su impacto en el equipo. En su trayectoria con el City, disputó 413 partidos, anotó 106 goles y se convirtió en el máximo asistente de la historia de la Premier League, además de ser el primer centrocampista del club en alcanzar los 100 goles desde Colin Bell.
La carrera de De Bruyne no siempre fue un camino fácil. Tras un breve y poco exitoso paso por el Chelsea, se marchó al Wolfsburgo, donde brilló y atrajo la atención del Manchester City, que invirtió más de 60 millones de euros en su fichaje. Desde entonces, se convirtió en una de las figuras más importantes del fútbol europeo y en un referente para los ‘sky blues’.
En su mensaje de despedida, el mediocampista recordó el impacto que la ciudad y el club han tenido en su vida: "Este siempre será nuestro HOGAR. No podemos agradecer lo suficiente a la ciudad, al club, al personal, a los compañeros de equipo, a los amigos y a la familia por este viaje de 10 años".
Aún no está definido el próximo destino del belga, aunque su talento lo convierte en una opción atractiva para muchos clubes europeos y del mundo. La única incógnita es su participación en el Mundial de Clubes de la FIFA, que se disputará del 14 de junio al 14 de julio. Su contrato expira el 30 de junio, lo que deja en duda si podrá completar el torneo con el equipo inglés o si extenderá su vínculo unos días más para jugar la competición.
Por ahora, los aficionados del Manchester City y del fútbol en general solo pueden agradecer y disfrutar los últimos meses de Kevin De Bruyne en la Premier League, donde ha dejado una huella imborrable.