Italia intentó parar a Haaland con provocaciones: "Me tocaba el culo, pero luego le di las gracias"
El noruego confesó que la provocación del central italiano Mancini lo motivó para conseguir su doblete

Italia necesitaba un milagro y acabó encontrándose con el peor enemigo posible: un Erling Haaland picado. El delantero del Manchester City firmó un doblete que hundió a la Azzurra y reveló, tras el encuentro, que Gianluca Mancini había intentado desquiciarlo con un marcaje al límite. El plan salió al revés: Noruega se llevó el partido y dejó a Italia señalada.
El incidente con Mancini que activó a Haaland
El duelo en San Siro había arrancado igualado, con Italia intentando agarrarse al orgullo y Noruega esperando su momento. Pero la tensión empezó a subir cuando Gianluca Mancini decidió adoptar un marcaje agresivo sobre Haaland, uno de esos que buscan más incomodar que defender. El propio delantero desveló después del choque la naturaleza de ese enfrentamiento. “Mancini siempre estaba encima de mí, a menudo me tocaba el culo. Al final le grité preguntándole qué hacía”, contó entre la sorpresa general. Para muchos habría sido motivo de desconexión; para Haaland, fue gasolina. “Le di las gracias porque me motivó para marcar dos goles”, añadió con una sonrisa.
El episodio no tardó en hacerse viral. No era la primera vez que el noruego lidiaba con intentos de provocación, pero sí una de las pocas en las que él mismo explicaba la escena con tanta naturalidad. Su respuesta llegó sobre el césped, donde transformó un partido que Italia había logrado equilibrar durante una hora.
Italia se desploma y Haaland decide el partido en dos minutos
Gattuso había diseñado un plan basado en minimizar riesgos y aprovechar el empuje de la grada, pero la estructura italiana se vino abajo en cuanto Noruega encontró espacios y encontró la figura de Haaland. Primero conectó una volea tras un centro perfecto, y apenas sesenta segundos después empujó el segundo tras una acción desde la derecha. Dos golpes secos, consecutivos, que borraron de un plumazo cualquier intento de reacción italiana.
El seleccionador italiano lo resumió con impotencia. “No tocó el balón durante una hora y luego clavó un golazo. Es una máquina de hacer goles”, admitió Gattuso. Las cifras lo avalan: 16 goles en 8 partidos de clasificación y 55 en 48 encuentros con su selección. Un auténtico coloso.
Críticas feroces en Italia y alivio absoluto en Noruega
Mientras Haaland se marchaba entre aplausos de la afición noruega desplazada a San Siro, el ambiente alrededor de la Azzurra era incendiario. Italia suma así su tercera repesca consecutiva y revive viejos temores que llevan persiguiendo al país varios años.
Para Noruega, en cambio, la noche fue histórica. El equipo regresa a un Mundial casi tres décadas después, y lo hace con un delantero que no había nacido la última vez que estuvieron en el torneo. Haaland lo celebró. Mancini buscó sacarle del partido… y terminó saliéndole rana.