Confirmado el peor de los presagios para De Bruyne
Kevin De Bruyne sufre una rotura de alto grado en el bíceps femoral y no volverá a jugar hasta inicios del próximo año, confirmándose así una baja sensible para el Nápoles de Antonio Conte
Kevin De Bruyne vivió una noche amarga en el duelo entre el Nápoles y el Inter de Milán. Apenas unos segundos después de marcar de penalti, el belga se llevó la mano al muslo derecho con gestos aparentes de dolor y tuvo que abandonar el campo entre gestos de impotencia. Las pruebas médicas posteriores confirmaron las peores sospechas: una lesión de alto grado en el bíceps femoral que lo dejará fuera hasta 2026.
El comunicado oficial del Nápoles fue clarificador: “Tras la lesión sufrida durante el partido contra el Inter, Kevin De Bruyne se sometió a exámenes médicos que revelaron una lesión de alto grado en el bíceps femoral del muslo derecho. El futbolista ya ha comenzado el proceso de rehabilitación”. Aunque el club evitó precisar plazos, este tipo de dolencias suelen requerir más de tres meses de baja, lo que descarta su regreso antes del nuevo año.
Un mazazo deportivo para Conte y el proyecto del Nápoles
La lesión llegó en el minuto 33 del encuentro. Tras anotar el penalti que abría el marcador, De Bruyne apenas pudo celebrar: se giró, hizo un gesto de dolor y se tocó la parte posterior del muslo. Ni siquiera pudo apoyar la pierna afectada cuando abandonó el terreno de juego, una imagen que heló a los aficionados napolitanos.
El ex del Manchester City, que aterrizó este verano en el Diego Armando Maradona como fichaje estelar, había sido titular en 10 de los 11 partidos disputados hasta ahora. Su llegada generó enorme expectación en Italia, sobre todo tras su reencuentro con los cityzens en el Etihad Stadium.
Hasta el momento, De Bruyne había firmado cuatro goles y dos asistencias, aunque su rendimiento no ha sido el que se le presuponía a un jugador de su calidad, llegando a levantar ciertas críticas en algunos sectores de la afición napolitana.
Emergencia en el centro del campo napolitano
La baja del belga supone un nuevo quebradero de cabeza para el técnico italiano. Conte deberá reestructurar su centro del campo, más aún con la inminente marcha de Frank Zambo Anguissa para disputar la Copa África con Camerún.
El escocés Scott McTominay, designado MVP de la pasada temporada, apunta a recuperar su posición natural en el eje central, tras haber sido desplazado más a la banda por la llegada de De Bruyne. También se espera el regreso del esloveno Stanislav Lobotka, actualmente lesionado, aunque su evolución marcará los plazos de Conte.
El Nápoles no descarta acudir al mercado de invierno para cubrir la baja de su estrella en caso de que se complique la recuperación, para evitar que se vean comprometidos los objetivos del equipo en la Serie A y en Europa.
A sus 34 años, Kevin De Bruyne se enfrenta a la batalla de la recuperación de una lesión, confiado en volver más fuerte.