Fiesta sevillana con ambiente espectacular a la altura de El Gran Derbi

Las dos aficiones deslumbraron en los prolegómenos del derbi con un recibimiento espectacular a los futbolistas antes de salir hacia Nervión, con colorido y un apoyo multitudinario

La capital hispalense se desperezó esta mañana de manera diferente, con la certeza de que la emoción del derbi ya se encontraba en el aire y con un deseo inevitable de salir a la calle para apoyar a su equipo y comenzara la fiesta en la ciudad.

Así, desde primera hora se respiró un magnífico ambiente, porque las aficiones no tardaron en darse cita en los lugares previstos para concentrarse. La sevillista lo hizo finalmente en los aledaños del estadio, en la calle Benito Más y Prat, y la bética a las puertas del hotel de concentración, el Al-Andalus, en la zona de La Palmera.

Los aficionados de Sevilla y Betis, muy tempraneros

Sobre las 11 horas ya empezaron a reunirse aficionados sevillistas, con la aparición del símbolo del escudo tachado que rompió las relaciones entre Sevilla y Betis durante un tiempo. Se encendieron bengalas rojas y empezaron a sonar cánticos, habiendo un momento en el que aparecieron los antidisturbios para controlar la situación, lo que provocó que se marchara de esa zona algunos de los hinchas.

Por parte bética, después de que ayer recibieran al equipo en el hotel, desde muy temprano había personas concentradas a la espera de la salida del equipo rumbo a Nervión y se vivieron momentos muy pasionales, como cuando de forma improvisada todos los presentes entonaron el himno a capela, con bengalas verdes para dar color al escenario. Entre la multitud se colaron Joaquín Sánchez y Manu Fajardo, que se dieron un baño de masas con el beticismo.

Ya al mediodía, alrededor de las 14:00 horas, se desató la fiesta en los dos puntos de la ciudad, cuando llegaron los autobuses y los futbolistas salieron de los hoteles para montarse en el transporte que los ha llevado a la Bombonera. Más bengalas y un ambiente de locura en los dos bandos, llevando prácticamente en volandas a un bus que avanzaba entre la multitud y un potente despliegue policial.

Igualmente, comenzó la marcha a pie de los aficionados de béticos con entradas para el derbi, dentro de un cordón policial para evitar cualquier incidente después de lo ocurrido en los últimos días con varia peleas. Un camino hacia el campo del Sevilla que ha transcurrido sin mayores problemas y que ha alimentado el ambiente espectacular de un derbi muy esperado y deseado que ha detenido el corazón de la ciudad para que lata únicamente en clave futbolística. Todo un espectáculo que ahora hay que refrendar sobre el terreno de juego.