Estadio Deportivo3 min lecturaNo hay día en que no ocurra algo en el Sevilla. Cuando todo parecía volver a su cauce con el título de la Europa League y la clasificación para la Champions, la petición de Monchi para tomarse unos días de reflexión y las negociaciones para la continuidad de Mendilibar ponen en jaque al club.
Y ahora también hay noticias en lo institucional. Aunque, al menos esas, parece que darán estabilidad al club hasta finales del próximo año, lo que ayuda bastante en estos momentos.
El Tribunal de Instancia Mercantil número 2 ha estimado sólo de forma parcial la demanda que presentó José María del Nido Benavente contra el acuerdo que rechazó el cese del consejo en la junta general de Accionistas del Sevilla, celebrada el pasado 29 de diciembre de 2022.
El que fuera presidente del Sevilla, pedia en ella el cese de todo el actual consejo de administración y la presencia de un administrador judicial mientras se convocaba una junta general de accionistas extraordinaria, con la que pensaba auparse de nuevo al poder.
El juez entiende que Del Nido Benavente debió haber podido votar en dicha asamblea, pero que no hay base alguna para cesar al consejo, que podría seguir mandando hasta el final del paxto enree los grandes accionistas, que finaliza el próximo año.
Por su parte, los abogados de Del Nido entienden, por ello, que la decisión del Tribunal Mercantil número 2 les dan la razón en parte y, por ello, no descartan recurrir a la Audiencia Provincial.
Al menos esto debería dar tranquilidad en el club hasta que en diciembre vuelvan a verse las caras en la próxima junta general de accionistas del Sevilla, en la que el expresidente Del Nido volverá, sin duda, a la carga, aunque tenga que esperar al final del pacto para poder optar a tomar el mando.
Con este resilución el actual consejo que lideran José Castro y José María del Nido Carrasco seguirá trabajando con la mirada puesta exclusivamente en lo deportivo y en dar al Sevilla el mejor equipo para una próxima temporada en la que hay muchas incógnitas abiertas, pero también en la que hay puestas muchas ilusiones.